Ediciones B coge en 1986 el legado de lo que habían sido las revistas Bruguera con una hornada de nuevos autores que presentaban historias más modernas y gamberras, al gusto de las nuevas generaciones, y que convivían con las historietas más clásicas. Un periodo que duró unos cinco años y en el que se actualizaron las nuevas revistas semanales. Autores noveles, como Miguel, Ramis, Cera y Marco, contribuyeron a ello con un humor menos infantil, mientras que autores veteranos, como Jaume Rovira, Joan March, Martz Schmidt y Ramón María Casanyes, continuaban en plena forma. Sin olvidar el retorno, claro está, de Francisco Ibáñez y Jan.
José Luis Marco Gracia (Marco), estuvo en esa época y dejó un agradable recuerdo en los lectores con sus personajes pero luego desapareció del mundo de la viñeta, sabiéndose muy poco de su trayectoria. Como suelen decir en los trailers de algunas películas… ¡Hasta hoy!.
Empezamos con un un prólogo de lujo a cargo de Jaume Rovira.
Rovira entró en Bruguera a inicios de los setenta. Empezó entintando páginas de Vázquez, e imitando el estilo Ibáñez por imposición editorial, aunque pronto se hizo el suyo bebiendo de dibujantes extranjeros que admiraba como Uderzo. Sus series estrella Segis y Olivio (1972) y Los cinco amiguetes (1978), que son las que se mantuvieron hasta el cierre editorial, fueron evolucionando en cuanto al dibujo. Ya en Ediciones B, el dibujo de Rovira se vuelve más de linea clara en series como Piluca, Angel u Obeso Pisafondo.
Prólogo:
MARCO
UN DIBUJANTE CON UN HUMOR FRESCO Y DIRECTO
por Jaume Rovira
Con José Luis Marco nos conocimos en la presentación de la editorial Compañía General de Editores, donde se editó Garibolo y Bichos, allá entre canapés y cava coincidimos un montón de dibujantes, entre ellos Vázquez también, que andaba como Pedro por su casa, y que enseguida se hizo el "puto amo" de aquella redacción, que por cierto, duró bien poco.
Después nos reencontramos en Ediciones B, allá en la nueva etapa de las revistas ex-Bruguera, nos conocimos mejor y empatizamos. Años después y por mediación del amigo y colega Esegé, entré a trabajar en Docon Films, en pleno "boom" del Dibujo Animado, que coincidía con la decadencia del cómic.
Había cada vez más trabajo y se necesitaba gente nueva, storyboders, así que recomendé a Marco. Aprendió rápido. Allí estuvimos unos cuantos años, serie tras serie, y gracias a las coproducciones, conociendo a gente muy interesante de diversos países. Gracias a uno de estos contactos, Marco se fué a trabajar a París, y allá, de manera bastante rápida e inusual en este mundillo, llegó a ser realizador. Entonces fue él quien me ofreció un trabajo en cuanto se dió la oportunidad. Hemos trabajado en series como Sylvan, Problem Child, Les Petites Sorcières.
José Luis ha estado muchas veces en mi casa y yo en la suya en París. Hemos compartido muchas horas de historias, de paseos, charlas , risas, de todo. Recuerdos entrañables.
Como profesional, fantástico, tanto como guionista que dibujante, rápido de mente y "muñeca", humor fresco y directo. Dentro de la empresa, nunca se deja amilanar por los de "arriba", un carácter realmente indómito e independiente.
En Docon empezamos a llamarle "El maño", realmente reflejaba en su conversación muchos tópicos, que visto lo visto, no lo son tanto, del humor aragonés. Siempre te sorprende con sus comentarios directos, sarcásticos, cínicos y a veces cáusticos. Realmente divertido, y en el fondo, un buenazo.
Por último, su facilidad para los idiomas, a parte del español, habla perfectamente el francés, el catalán y el inglés, y no sé si habrá aprendido otro, que es muy capaz.
En fin, pues eso, que ha sido, es, un privilegio haberlo conocido. Un abrazo José Luis!
Los personajes de Porrambo y Jarry Jarron se integrarón con los de toda la vida Bruguera. Aquí dibujados por Rovira en un Mortadelo especial Basquet. | |
ENTREVISTA A
MARCO (1ª parte)
-¿Cuáles eran tus lecturas comiqueras de joven?
Bueno, para empezar El Llanero Solitario, aunque también me gustaban Capitán Trueno, Jabato, prácticamente todo lo que editaba Bruguera. Más tarde llegarían Zarpa de Acero, Kelly Ojo Magico, Max Audaz (!) y los Súper Héroes, cuando Vértice los comienza a publicar; todavía después, los clásicos americanos (Flash Gordon, Príncipe Valiente, etc.) cuando los empieza a editar Buru Lan, luego los Totem, Metal Hurlant y lo que fue cayendo (que fue de todo)
Varios personajes de cómic bajo el prisma de Marco en Ediciones B |
-¿Fuiste un dibujante autodidacta?
Completamente. Dibujaba bien en la escuela, me gustaba y, a diferencia de mis amigos, que querían ser pilotos de carreras, futbolistas y yo qué sé, a mí lo que me llamaba era ser dibujante de historietas. Adolescente, pillé el Curso por Correspondencia de Dibujante de Historietas de CEAC, pero la verdad no me sirvió para gran cosa... eso sí, me dieron el diploma ;)
-¿Qué dibujantes admirabas y te gustaban cuando eras niño?
Ambros (quién mejor escenificó Capitán Trueno), Coll (TBO), Uderzo, Franquin (el mejor para mí). Luego Alex Raymond (el más elegante de todos los tiempos), Hal Foster, Will Eisner, Frazetta, Giraud-Moebius, Breccia, Hugo Pratt, y un largo etcétera.
-¿Cuáles fueron tus primeros trabajos publicados?
Una tira en la revista 1984. Había un concurso donde te regalaban una suscripción y mi amigo Fernando me propuso una idea, que yo dibujé y envié para ver si sonaba la flauta... ¡y sonó! Los dos obtuvimos la suscripción gratis (enorme victoria se mire por donde se mire. La tira escenificaba a un chaval que hace pompas de jabón, una de ellas se convierte en la Tierra, crece y crece... y termina por explotar... y ahí vamos... Tiempo después, publiqué tres chistes (¡tres!) en la revista Harakiri, y éste se convirtió en mi primer trabajo remunerado como mandan los cánones.
-¿Realizaste algunos fanzines?
Cosa curiosa, mi personaje Jarry Jarron fue creado mucho antes de ser publicado en Ediciones B, y era mucho más salvaje, definitivamente para adultos. Hice una primera historieta, que ni recuerdo cómo apareció en un fanzine, que nunca vi (!). Me pidieron una segunda, que hice y... más de lo mismo (!!). Con el tiempo, Jarry vio la luz e incluso adapté las dos historias (descafeinadas) y, curiosamente fue la única vez que el director de Súper Mortadelo me felicitó por la calidad de mis guiones. Esos dos guiones adaptados y descafeinados.
-¿En 1986, ya desaparecida la editorial Bruguera, entras en la revista Garibolo de Compañía General de Ediciones con el personaje Torpón de los Monos? Una suerte de Tarzán con aspecto de Hug el trogolita de Gosse. ¿Cómo fuiste a parar a esa editorial y qué recuerdos guardas?
Todavía viviendo en Zaragoza, donde me crié, me enteré no recuerdo cómo de la creación de las revistas Monstruos y Garibolo; yo tenía ese personaje que era una caricatura de un Tarzán sin afeitar (¿dónde has visto tú un supermercado en la jungla para comprar espuma y cuchillas?) El tipo era burro como él solo, y dos monos en una rama se mofaban de él todo el rato (los dos vejetes del Muppett Show, vamos). Luego tuve que adaptarlo un poco para que no se pareciese demasiado a Hug, incluso recuerdo haber hablado de ello con Gosse, pero mi idea era diferente de la suya, y la sangre no llegó al río pero, morfológicamente, Hug y Torpon se parecían, eso está claro. Al pasar a Ediciones B y, para evitar posibles problemas, Torpon se convierte en Porrambo, pero creo recordar que alguna vez los monos seguían apareciendo en el árbol (no estoy seguro).
Garibolo nº 13 / 1986
-La aventura editorial de Garibolo dura poco y pronto pasas a trabajar para Ediciones B, presentando nuevos y divertidos personajes que quedaron grabados en las mentes de los lectores juveniles de aquellas épocas. Ahí tenemos a esa parodia de Rambo que es Porrambo.
Porrambo es el tercer personaje que creé en Ediciones B; el primero fue Gelo para Pulgarcito y el segundo Dr. Frank y Einstein, para Zipi Y Zape no recuerdo bien. En realidad, todos aparecieron casi a la vez, hacía falta llenar un montón de páginas, escribirlas y dibujarlas, y fue así como Jarry Jarrón salió del cajón donde descansaba tranquilamente. Con diferencia, mi personaje preferido.
-Porrambo no se tomaba la guerra muy en serio, ante el estupor de su acompañante, un perro llamado perro o Héroe. El jefe de Porrambo, el coronel MacMajara solía acabar saliendo malparado, como mandaban los cánones. Se aprecia que disfrutabas con esta serie de la que hasta hiciste incluso algún póster para las revistas. Este personaje es muy recordado entre los lectores. ¿Puedes hablarnos un poco?
Lo concebí como lo que era, una caricatura del todopoderoso y musculoso Rambo, ante la dificultad de continuar con Torpon. El perro era más inteligente que él, de aquí a Lima, y el coronel (inspirado por Custer) tampoco tenía muchas luces, los “chinos-vietnamitas” (esto puede que hasta me valga una acusación por racismo en los tiempos que vivimos, pero en la época yo los llamaba así) se salían siempre con la suya, o bien hacían fracasar los planes “macabros” de los otros dos. Pero de todos los personajes en la serie, mi preferido era el perro, que se las veía y se las deseaba para no sucumbir ante la incompetencia de sus amos... ni siquiera era original. Yo ya había conocido perros, en la vida real, más inteligentes que sus amos. Doy fe.
-¿Te daban algunas directrices o ideas para crear a los nuevos personajes? ¿Cómo presentabas tus nuevos proyectos?
Al llegar yo a Ediciones B, el problema era llenar las páginas de las diferentes revistas con material nuevo. Como ya expliqué, Torpon no era viable, así que creé primero Gelo, Dr F y E, casi al mismo tiempo Porrambo sale de las cenizas de Torpon, aunque el concepto no tenga nada que ver con el original y, en último lugar, Jarry Jarron. Me preguntan si seré capaz de hacer 6 páginas con un personaje, y contesto que of course, faltaría más. En realidad, el personaje ya estaba en mí, y lo único necesario era edulcorarlo para los gustos más infantiles, como ya tenía experiencia en la materia, me puse a ello y lo disfruté.
Super Mortadelo nº 51 y 43 /1989
-Tu otra serie que hizo las delicias de los niños fue Jarry Jarrón. Creado para la revista Súper Mortadelo. Un detective con forma de sabueso, que quién sabe si inspiró años más tarde a Juan Díaz Canales y Juanjo Guarnido para su Blacksad. Un detective que fumaba e iba con camiseta imperio como manda el género. Esta fue tu última serie para Ediciones B. ¿De dónde nace esta obra? Más de 75 historietas publicadas que parodiaban el género negro y el pulp, aun cuando los niños ni sabían qué eran…
Precisamente por eso yo tenía la sensación de que Jarry funcionaría, nadie había tocado el tema para los chavales, y a mí me daba marcheta el ambientillo “negro” y el personaje macarrilla que es Jarry. Directamente inspirado de las formas de Humphrey Bogart, canijo como él solo, pero con labia, y fanfarron al punto que el caballo de Espartero pareciera eunuco. En cuanto a posible inspiración de Blacksad (buenísimos dibujos, pero nunca lo leí), lo ignoro por completo. Aquí el único tipo verdaderamente original es aquél que pintaba monigotes en las paredes de la cueva, los que vinieron detrás copiamos el estilo, y terminamos por hacernos todos selfies. Ahí es nada.
¿Os imagináis una revista infantil de kiosko con esa estampa de la portadilla del álbum Olé dedicado a Jarry Jarrón? Eran otros tiempos...
-Para la revista Súper Zipi y Zape creas también Dr. Frank & Einstein, una serie de sabio loco y su ayudante monstruoso. Ambos viven juntos y cada semana el profesor Einstein inventaba alguna tontada sin mucha utilidad ante la perplejidad de Frank.
Como ya dije antes, comencé con Gelo en Pulgarcito, y su director (cuyo nombre no recuerdo) una persona súper amable. Me convenció para hacerle otro personaje en el “Súper ZZ...” y así nacieron. El problema es que yo tenía meses donde me curraba cuarenta y más páginas en total, eso era demasiada dinamita para mí, y tuve que ir renunciando a cosas por falta de tiempo. Cuando anuncié eso a mi director, y aunque lo entendió y no puso ninguna pega, me dijo que lo lamentaba, porque le gustaba mi trabajo. Insisto, un gran tipo, por más que olvidé su nombre :(
Dr Frank & Einstein en Zipi y Zape números 82 y 83 / 1987
-En la revista Guai! creas la página de humor “Radio Guai! F.M” a partir del número 101 y por la que pasan personajes que aparecen en sus tebeos. Era una serie un tanto peculiar por el formato. ¿La recuerdas?
Sí, claro. Fue breve pero intenso; siempre en contraportada, un dj que tenía un gato y recibía gente en el estudio. En aquélla época era bastante común que la gente llamase a la radio durante la noche para contar... de todo (más barato que un psicoanalista ya es) y como yo trabajaba a menudo de noche...pues ahí está la inspiración (!). Duró hasta que B me llamó al orden (a mí y a otros) por supuesta deslealtad por trabajar con la competencia; después les “levantaron” a Ibáñez, que volvió a B para continuar Mortadelo, y ahí las aguas se volvieron mansas y todos fueron felices. La revista Yo y Yo se finiquitó más tarde Guai! plegó, claro.
CURIOSIDADES:
Como veremos en la 2º parte de la entrevista, Marco ha intervenido en multitud de series de dibujos animados. Storyboard de Les Légendaries
Dedicatoria de Marco a otro genio de la historieta Escobar
Prólogo del propio autor con su caricatura para el cómic: Páginas Pecaminosas / 1990