lunes, 30 de enero de 2017

Juanjo Guarnido en Cómics Forum

 
Para todos los que amamos el mundo del cómic el nombre del granadino Juanjo Guarnido (1967) nos lleva directamente a esa obra de arte que es Blacksad. Un cómic con personajes antropomórficos protagonizado por un gato ambientado en los Estados Unidos de los años cincuenta, con gansters, detectives, sordidez, problemas raciales, comunismo, la amenaza nuclear, mujeres fatales… Pura novela negra. Todo un cóctel que ya abarca cinco álbumes con los que han sido multipremiados  tanto Juanjo Guarnido como su guionista y también dibujante Juan Díaz Canales. A destacar tres Premios Eisner 2013 al mejor artista multimedia, a la mejor edición de material internacional y el quinto álbum lo obtuvo en 2105 en la categoría de Mejor Álbum Internacional. También ha obtenido el Premio Nacional de Comic en 2014 es España.

Es un gozo observar la composición,la acuarela y el entintado de Juanjo Guarnido en Blacksad y el acabado cuidado en diferentes aspectos con que están realizado esta obra. El primer álbum tuvo una fase de producción de siete años y se publicó en el lejano año 2000. Tanto él como Juan Díaz Canales lo movieron por diferentes editoriales y fue la la francesa Dargaud la que se llevó, nunca mejor dicho, el gato al agua.
 
 
Lo que destacaremos en esta entrada son los comienzos de Juanjo Guarnido, en los que publicó en diversos fanzines y revistas, pero sobre todo empezó a despuntar en sus colaboraciones en Cómics Forum. En los años 80 los cómics de esta editorial llevaban multitud de complementos y cuando se terciaba posters de los personjes Marvel. Muchos de estos fueron realizados por él y aquí recogemos una buena muestra.

Comics Forum le sirvió de puente para intentar entrar en Marvel, pero esas puertas le fueron cerradas, lo que le llevo a trabajar en 1990 en diferentes series de animación españolas y en 1993 a trasladarse a París, donde comienza a trabajar como animador de Disney Studios en Montreuil en películas realizando layouts de Goofy e Hijo, El Jorobado de Notre-Dame y como animador en películas como Hércules (con el personaje de Hades), Tarzán (con el felino Sabor y el padre de Tarzán) y Atlantis.
 
 Ilustraciones aparecidas en Clásicos marvel Forum en 1988

Pero Guarnido no perdió la pasión por el cómic trabajando en la animación y así dibujó a Blacksad, algo que, como el propio autor dice en muchas entrevistas, fue posible en parte por no haber entrado en Marvel.

Juanjo también se ha atrevido con el cómic infantil y el estilo clásico con Brujeando, con guion de Teresa Valero. Una historia que debía de ser una serie de animación pero acabo publicada en cómic en tres tomos.


Arriba un Power Man una tanto peculiar
Abajo: Ilustración aparecida en What If ? nº 29 de Comics Forum en 1989

Poster triple de Juanjo Guarnido

viernes, 20 de enero de 2017

Reseña: Star Trek: La Ciudad al Borde de la Eternidad. Drakul Editorial


Así como en España los cómics de Star Wars siempre han tenido su popularidad, los de Star Trek no han tenido tanta suerte. La mítica editorial Vértice lo intentó a inicios de los ochenta y Planeta editó la serie Star Trek La nueva Generación allá por 1995. Un cómic que se acompañaba de buenos artículos y complementos sobre el mundo trekkie, pero que no paso del número doce. O los pocos tomos con cómics de la serie clásica también publicados por esas fechas.  Los cómics de Star Trek después han pasado por otras editoriales siempre con pocos números. Hoy es la editorial Drakul la que edita diversos tomos esporádicamente.  Y en esta ocasión nos presenta una joyita para los buenos gourmets de esta serie de ciencia ficción y de los cómics magníficamente dibujados: Star Trek: La Ciudad al Borde de la Eternidad.

  
El cómic adapta el guión original del celebre escritor de ciencia ficción Harlan Ellison. La historia se nos muestra tal como fue concebida y no como finalmente fue rodada por falta de presupuesto para la serie Star Trek en los sesenta. El guion original obtuvo el Premio de la Sociedad de Escritores de América (WGA) en 1967 al mejor guión dramático de una hora de duración.  Harlan Ellison es un prolífico escritor norteamericano cuyos trabajos publicados incluyen más de 1.700 cuentos, novelas, guiones, y ensayos sobre la literatura, el cine, la televisión. nunca estuvo contento con ese capitulo porque no se había respetado su guión original, y porque no le pagaron el porcentaje de los derechos de comercialización, entre otros, del episodio en cuestión, tema este que se solucionó en 2009.

De entrada ya nos damos cuenta de que no estamos frente al típico cómic de Star Trek gracias a las portadas de Juan Ortiz que mezclan diseño vanguardista con vintage, proporcionándonos una delicia visual. Para el que no le gusten este tipo de portadas experimentales, también se incluyen las portadas de Paul Shipper de estilo más clásico pero muy vistosas.

El arte de Juan Ortiz

La Historia:
Beckwith trafica en el Enterprise con una potente droga: las gemas del sonido. Los problemas de adicción de uno de los tripulantes harán que Beckwith escape de la nave. Esto traerá consecuencias insospechadas, pues acabará cruzando un portal temporal en la ciudad al borde de la eternidad. Kirk y Spock tendrán que darle caza para impedir que el presente se desmorone.

En sí el cómic presenta una nueva revisión de los viajes en el tiempo y las consecuencias dramáticas que estos acarrean. Este hecho hace que aflore la parte más humana del Capitán Kirk y del Comandante Spock, ambos con sentimientos bien diferenciados.

El guión está adaptado por Scott y David Tipton y el dibujante es J.K. Woodward, que lo traduce en una maravilla de ilustraciones. Nunca un cómic de Star Trek se había acercado a este virtuosismo visual. Kirk, Spock, Janice Rad y por supuesto Edith (el personaje que interpretaba Elizabeth Taylor en el capitulo original) están logradísimos. Las expresiones y los gestos son los de los actores y lo más increíble es que Woodward no usa efectos digitales, todo está dibujado en papel y pintado después con gouache. Esto otorga a cada viñeta la sensación de una ilustración como si se tratase del cómic El Mercenario de Vicente Segrelles. Solo dos páginas son a tinta para contrastar dos escenas y abrir un paréntesis oscuro. El dibujante también consigue una buena ambientación y atmósfera cuando están en el año 1930.


El tomo recopila la mini serie de cinco números adaptando el mítico episodio tal como lo concibió Harlan Ellison y esta vez con el beneplácito del escritor, tal y como se lee en el prólogo y en algunos textos que se incluyen, escritos por él mismo.

Otro aliciente es que se incluyen once páginas donde el dibujante da explicaciones y anotaciones sobre diferentes viñetas con curiosas revelaciones, por ejemplo, cómo plasma el efecto de teletransportación en el cómic. Menos interesante es saber los cameos que aparecen a lo largo del cómic.

Hay algunas diferencias entre este cómic y el capítulo emitido en televisión. De entrada el Dr. Leonard McCoy no aparece, ni por supuesto se consumían drogas en el episodio de TV, y por falta de presupuesto no hacían acto de presencia los guardianes de la eternidad, por lo que es divertido comparar ambos formatos.

La ciudad al borde de la eternidad es una propuesta tanto para los trekkies como para los que quieran acercarse a este saga a través del cómic con unos espectaculares dibujos de Woodward. Es puro Star Trek, pura ciencia ficción con romance, sentido del deber, lucha de clases y algo de acción.



Star Trek: La Ciudad al Borde de la Eternidad.
Editorial: Likantro
Tapa blanda
Páginas: 128 páginas
Dimensiones: 245x170x1 cm
Precio: 15,34€

viernes, 13 de enero de 2017

Presentación mesa redonda: TBO 100 años, el tebeo que dio nombre a los demas / TBO 100 anys, el tebeo que va donar nom als altres

El pasado viernes 2 de diciembre de 2016 se llevó a cabo la presentación del libro “TBO 100 anys, el tebeo que va donar nom als altres” (tambien disponible en castellano) en la Biblioteca de Catalunya. El libro esta escrito por el periodista y divulgador del cómic Jordi Manzanares. Le acompañaron en la mesa redonda Joan Anton Sànchez, editor del ´libro; José Luis Martín, dibujante de personajes tan populares como Quico el pogre y director de diversas publicaciones, y Jaume Capdevila ‘Kap’, autor de la cubierta del libro, humorista gráfico, y divulgador de la historieta.

La presentación no estuvo exenta de polémica ya que Ediciones B posee los derechos marcarios de TBO, y así lo hizo saber en un comunicado. Además está previsto que en marzo la editorial publique, también, un libro sobre TBO a cargo del investigador y divulgador Antoni Guiral.








Aquí podéis leer las cápsulas más interesantes en, claro esta, la 9º mesa:

Eugènia Serra. (Directora Biblioteca de Catalunya): La Biblioteca de Catalunya colabora con este tipo de estudios que se hacen con una calidad de contenidos muy buena. El TBO es una cabecera de referencia para varias generaciones. En 2017 la Biblioteca se sumará a los actos del centenario con una pequeña muestra con originales del TBO y un seminario sobre el mismo. Lo importante es que los autores sean reconocidos, la obra estudiada y el patrimonio se conserve.

Roser Pintó. (Directora de la Unitat Gràfica Biblioteca de Catalunya): Lo que tenemos en la biblioteca es una muestra representativa del TBO, pero muy poca. Es un milagro que, incluso esto, nos halla llegado porque durante todo el siglo XX el concepto de derechos de autor no existía y las editoriales solían hacer limpieza de originales o nunca los devolvían a sus autores. Los TBO que se tienen de 1917 a 1950 se pueden considerar un milagro. Del archivo administrativo disponemos de cuatro cajas con documentos internos y contables, que nos permiten ver cómo funcionaba la editorial en aquella época. De dibujos originales tenemos un centenar de autores diversos, Benejam, Castany, Opisso, Bernet Toledano, pero nos faltan series destacables y algún autor como Coll, uno de los más personales del tebeo. La familia Matilde Viña nos ha cedido el archivo administrativo de documentos que he citado. Ante esta falta de material estamos llevando a cabo una política de recuperación. La revista en sí la tenemos prácticamente completa a partir del año 1983, porque es cuando llega el deposito legal a las bibliotecas. De los años anteriores disponemos de ella de manera muy dispersa. No se conoce ninguna colección pública completa.





Jordi Manzanares: No es el TBO cualquiera, es el que dio nombre a los demás, incluso a los que no son infantiles. El TBO no fue el primero, había tebeos antes, pero muy rápidamente adquirió una popularidad extraordinaria. Ya en el año 1931 hay una canción que se titula: yo quiero un tebeo, que demuestra que todo el mundo usaba este nombre para referirse a este tipo de publicaciones. La palabra está aceptada por la Real Academia. El TBO tuvo un gran éxito y una vida muy larga: empezó en 1917, deja de salir hacia 1938 a consecuencia de la Guerra Civil, sale otra vez después, desaparece de nuevo en 1983 por la crisis de la empresa y tuvo dos renacimientos, uno por parte de la editorial Bruguera y otro por Ediciones B, editándose hasta el año 1993. Sin contar las ediciones recopilatorias. Todo el mundo ha tenido en casa algún TBO, aunque llego un momento en que la revista se quedó un poco anticuada respeto a sus competidoras y esto aceleró su muerte. Pero no olvidemos que en el año 1957 la cabecera llegó al punto máximo con ¡trescientos cincuenta mil ejemplares entonces quincenales!

Jaume Capdevila “Kap”: Yo era un niño de tebeos de Bruguera, cuando terminaba todas las cabeceras entonces leía el TBO. Entonces lo veía ramplón comparado con los tebeos de Bruguera. Unos dibujos muy atestados y pequeños. Después, al irme interesando por el dibujo y la historia de sus dibujantes, descubres que el TBO es la base y la raíz de lo que ha sido la industria de los cómics de este país. Bruguera no hubiese sido posible sin que antes hubiese existido este TBO. No se si serían mejores o peores, pero no serían los que hemos conocido. El TBO además de ser una parte de la historia de los cómics de nuestro país, fue también una concepción, una idea, una manera de hacer la revista o modelo editorial que se mantuvo durante muchos años con sus vicios y virtudes. La composición de la página, el tipo de humor blanco... El Patufet también tuvo éxito pero en verdad era un revista literaria, las viñetas eran un relleno. O también podemos recordar la flor de verano que fue la revista Dominguín. El TBO cuando apareció fue algo revolucionario porque era una revista lúdica en las que primaban las historietas por encima de la literatura infantil con texto. Se le daba importancia al dibujo, a la historieta, al gag. Con pocos medios y ajustando los gastos, hicieron un producto que funcionaba y marcó el futuro de la historieta.

 Páginas interiores del libro

José Luis Martín: Yo soy y era un entusiasta del TBO. También leía Pulgarcito y me gustaban los dos. Aunque era pequeño, yo tenía claro porqué me gustaba una y otra. Pulgarcito y Bruguera en general tenía una dirección editorial muy fuerte y en sus historietas había muchos elementos en común. Una página de seis líneas, con dieciocho o veinte viñetas, con un gag final, un tipo de movimiento, incluso un fondo similar común en aquellas historietas. El director González les decía a los dibujantes como quería que se hiciesen las cosas, pero en cambio en el TBO era maravilloso porque cada página era una pequeña sorpresa. Había personajes también, pero eran muy extraños Eustaquio Morcillón y Babalí, dos tipos que hacían unas trampas increíbles para cazar animales; Josechu el vasco que era un bestia, el Reyecito… Sí, era algo más infantil que Pulgarcito y seguramente ahora algunos de estos personajes no se podrían publicar, porque los ecologistas se cargarían a Estaquio, ni tampoco serían políticamente correctos o los negros dibujados por Coll. No hay ningún dibujante en el mundo que se parezca a Urda. El TBO era una revista en la que no sabías que venía en la siguiente pagina y eso era muy interesante para mí. Me seducía la mezcla de historias y estilos cuando tenia entre seis y diez años.
El primer dibujo que hice con conciencia de hacer un dibujo fue a los seis años al copiar una portada del TBO que era precisamente de un negro con el explorador en la cazuela. Me resultaba fascinante y puede que sea dibujante por haber hecho ese dibujo, pues mi padre lo llevó a su empresa y allí trabaja el hermano del dibujante Ayné, que le dijo que le gustaba mucho y eso me estimuló a mi para seguir.

Jordi Manzanares: Es curioso lo de las historias que ahora no se podrían publicar, y es que en aquella época del TBO, que era la etapa mas blanca e ingenua en cuanto al humor del mismo,  habían salido publicadas cosas absolutamente increíbles. Había una sección que se titulada De todo un poco, allí apareció una vez una viñeta muy pequeña que se titulaba “judías hervidas” y estaban dibujadas unas señoras dentro de una olla. De hecho las historias de la Familia Ulises empiezan comiéndose al perro.

José Luis Martín: Pero dentro de esta linea muy blanca lo dibujantes eran excepcionales y tenían ideas muy buenas. El humor absurdo y curioso del Coll es posible que no hubiera tenido cabida en ningún otro lugar.

Kap: Fue un plataforma donde encontramos a Urda, Benejam, Coll, Arturo Moreno, Sabatés, Blanco, entre muchos otros y cada uno con su particularidad y su propio talento. El TBO daba una cierta libertad en algunas cosas y no en otras. Hemos tenido unos dibujantes excepcionales y, seguramente, una industria editorial que no se los merecía. Aun hoy en día nuestra industria editorial arrastra vicios de las malas épocas pasadas y es una lástima. Hoy no hay un mercado editorial de revistas infantiles consolidada a causa de las malas prácticas de la época, pues no solo no se han respetado los derechos de los autores, sino que también se ha maltratado el de los lectores, como por ejemplo al publicar y re-publicar material repetido indiscriminadamente, recortando, pegando… Toda la masa lectora del TBO, o los de la editorial Bruguera acabó por dejar de leer. Hoy en día hay otros motivos, pero si se hubiese cuidado más al lector, seria algo muy diferente.

Jordi Manzanares: Coll era un artista, todas sus historias eran diferentes. Igual las hacia de dos viñetas que en una página, en vertical con viñetas redondas. él ajustaba la historieta a la idea. No partía del esquema previo que se hubiese encontrado en Bruguera. Porque aunque el modelo de Bruguera eran más moderno, en realidad era mucho mas rígido. La página con tantas viñetas impuestas… Era todo muy cuadriculado. Existían unas directrices del tipo de humor y en cambio en el TBO había más libertad.



Kap: Son 100 años de esta revista, pero son 100 años de esta profesión, de este país. TBO el tebeo que va donar nom als altres es un libro muy bien hecho, trabajado y documentado que explica esta historia. Es una historia necesaria y reivindicable, después de más de 50 años que se podían haber hecho libros sobre el el tema.

Jose Luis Martín: Hay un problema en este país, que es que cuando una cosa es muy popular automáticamente no se aprecia como algo artístico o cultural, y los tebeos eran enormemente populares, con grandes tiradas y que leían todos los niños. Además muchos de estos dibujantes eran represaliados y si no hubiesen tenido esta opción infantil-juvenil, no hubiesen podido seguir dibujando. Muchos procedían del humor satírico anterior, pero este desapareció hasta la transición.

Jordi: Respecto a esta falta de consideración de la cultura oficial sobre este tipo de productos, un ejemplo es la limitación del fondo que tenemos aquí, o que no se encuentren colecciones completas del TBO, ni de otras revistas infantiles. Es una catástrofe cultural. Las viñetas de la Familia Ulises son totalmente subversivas. Se retrataba España como era a través del humor blanco.

Kap: Los mismo editores no daban importancia a esto. Recortaban los originales o los tiraban. O no  conservaban un número de cada revista en el archivo. Como no se hacía entonces, lo hemos de hacer ahora con precariedad y urgencia. Todas estas colecciones dispersas y los originales tendrán que acabar en las instituciones.




EL TBO Y LA CENSURA:
Jordi Manzanares: El único traspiés grave con la censura que tuvo el TBO fue el siguiente: Un dibujante que se llamaban Manuel Diaz, en una sección de noticias imaginativas e inventadas, en un cuadrado muy pequeño hacía un chiste donde decía que, una eminencia que se llamaba Blas Pérez, había inventado un reconstituyente magnifico a base de embutido. Esto provocó que la revista fuese secuestrada y con una multa de diez mil pesetas. Porque Blas Pérez era el ministro de gobernación. El dibujante se excusó diciendo que había puesto ese nombre sin pensar.

-¿De dónde surgió el nombre de TBO?
Jordi Manzanares: El periodista y hombre de teatro Joaquín Arqués Escriña aconsejó al impresor Artur Suárez que para amortizar la imprenta hiciese una revista infantil: TBO. Joaquín había estrenado algunas piezas teatrales ligeras de revistas, y había colaborado en revistas sicalípticas. En esa época era habitual que hubiese revistas que con diversas letras hacían un nombre. Era como los niños que jugaban a esconderse que te veo. Este señor como hacía piezas teatrales es de suponer que conocía una pieza de teatro musical que se estrenó en Madrid en el año 1909 y que se llamaba TBO e iba precisamente de una redacción que estaba preparando el primer numero de un diario que se tenia que llamar TBO. Esto lo descubrió la secretaria del TBO Rosa Segura, autora del libro Ediciones TBO dígame, memorias de una secretaria. .

Kap: Los primeros números de la cabecera eran como todos la de la época, pero cuando entra Buigas en la editorial, lleva a cabo un replanteamiento, dando más cancha a la parte lúdica y gráfica, y se desprende de la moralina que impregnaba todas las publicaciones para niños. Sin hacer grandes barbaridades, era lúdico, un producto en su momento revolucionario. No había una cosa así en el mercado, divertido de verdad y al alcance de todos.


100 ANYS EL TEBEO QUE VA DONAR NOM ALS ALTRES
100 AÑOS EL TEBEO QUE DIO NOMBRE A LOS DEMÁS
Jordi Manzanares
Precio: 20 euros
Medidas: 210 x 270 cm / b/n
Idioma: Castellano
Diminuta Editorial
172  páginas

jueves, 12 de enero de 2017

Los Vengadores en Comics Forum

Tres años después de que la editorial DC creara a la Liga de la Justicia con sus superhéroes más populares, Marvel no se iba a quedar atrás y en 1963 de la mano de Stan Lee y Jack Kirby nacen Los Vengadores. Un grupo creado para luchar contra las amenazas que un solo héroe no puede vencer y para entrar en competencia con la DC. Sus primeros miembros fueron Hulk, Thor, Iron Man, El Hombre Hormiga y la Avispa. Aunque la presencia de Hulk duró muy poco y pronto se les unieron El Capitán América, Ojo de Halcón, Bruja Escarlata, Visión, Viuda Negra, Pantera Negra... En fin muchos personajes Marvel han desfilado por el popular súper grupo.

En 1983 Comics Forum publicaba por primera vez a Los Vengadores. Este primer Volumen duraría 132 números llegando hasta el año 1994.

Una publicidad inicial, la portada y la presentación Forum:

miércoles, 11 de enero de 2017

Dirty Dancing el Musical llega a Barcelona

Uno de los espectáculos contemporáneos de más éxito llega a Barcelona después de superar cualquier expectativa con su gira internacional. Lo mejor de los 80 regresa con Dirty Dancing.
 
A partir del 9 de febrero y hasta el 12 de Marzo en el Teatro Tívoli de Barcelona.
 
Este espectáculo logra transportar al escenario las emociones que provocaron Jennifer Grey y Patrick Swayze en la pantalla grande.
La trama de Dirty Dancing plantea cómo en el verano de 1963, Frances “Baby” Houseman, una jovencita de diecisiete años, se encuentra atrapada en unas aburridas y monótonas vacaciones junto a su familia en las montañas de Catskill, Nueva York. Sin embargo, la situación cambia cuando, durante una fiesta en el hotel, se topa con el guapo y famoso profesor de baile Johnny Castle. Baby, además de aprender unos cuantos pasos de baile, cambiará su vida para siempre.
 
La música en vivo y la danza son sin lugar a dudas los protagonistas de Dirty Dancing, ya que se vuelven cómplices de los personajes y crean una provocadora atmósfera que cada noche hará vibrar al público.



domingo, 8 de enero de 2017

Reseña teatro: Moustache, The Rhythm Musical de Coco Comin



La compañía londinense Moustache Music Hall recibe, a principios del siglo XX, el encargo de entretener con su espectáculo al mismísimo rey Eduardo VII. Los componentes de la compañía lo van a dar todo e incluso se extralimitarán peligrosamente delante de tan ilustre personaje. El pequeño Max (Sergio Franco) es el alma de la comedia de esta compañía. Él es bailarín, pero sobre todo es el clown y comediante estrella de la función Moustache, pero algo se está quebrando en su interior y ni tan solo su amada Mary piernas largas (Júlia Ordoñez), bailarina también de la compañía, podrá detener esta grieta…


Después de dos años de preparación Coco Comin presenta la comedia musical Moustache, en la que un buen puñado de números musicales se suceden a ritmo de claqué sobre el escenario. La directora y autora del libreto ha orquestado un vertiginoso recorrido por diferentes épocas y temáticas de la historia con trabajadas coreografías. Ante nuestros ojos desfilarán más de trescientas piezas de vistoso vestuario diseñadas por la propia Coco Comin. Se oirá el claque con atronadora nitidez,  pues los bailarines llevan micros en los zapatos y hay dispuestos una serie de micrófonos también bajo el escenario. La obra contó con un presupuesto de 500.000 euros y posee un macrodecorado en el que se proyectan imágenes que crean la ilusión de la existencia de diversos espacios y ambientes.
La música en directo es a cargo de Xavier Mestres junto a otros cinco músicos que tocan infinidad de instrumentos distintos. Diez claquetistas, nueve actores, cantantes y bailarines. Treinta y cuatro números musicales. La dirección coreográfica de expertos de tap-dance como Sharon Lavi y Júlia Ortínez. Moustache, the Rhythm Musical tiene todos los ingredientes para ser un gran espectáculo, pero…

  
Moustache es una explosión de claqué para los sentidos y esto no se le puede negar, sin embargo nos presenta una historia que ya ha sido contada en múltiples ocasiones: el payaso que está atrapado en un registro pero que quiere cambiar de faceta y no puede o no sabe cómo; la tristeza que esto le conlleva; la soledad y la amargura del artista consagrado y la locura. También el apoyo y la amistad y el amor por los escenarios.
En Sergio Franco recae el mayor peso de la función y defiende y borda muy bien su papel que requiere sobreactuación, el histrionismo del Joker de Batman, y un humor a lo Jaimito Borromeo solo apto para personas de cierta edad, porque el texto humorístico del que parte el personaje para mostrar que es el rey de la comedia no es lo suficientemente divertido, salvo algunas chispas y números muy concretos. Nos retrotrae a un tipo de humor de teatro antiguo y, a la postre, bajo esa percha de monólogos comparativos y juegos de palabras, hace parecer que el personaje sea un clown en decadencia y no la estrella de la compañía.

 ¡Un número con zapatones...!

Los actores y bailarines Ernest Fuster, Albert Martínez y Joaquín Catalán aportan, cuando intervienen, buena voz y algo de frescura y buen humor al conjunto del espectáculo. El número de publicidad y la pieza del los filósofos son buena prueba de ello.



Júlia Ordoñez la actriz que interpreta a la novia del pequeño Max, destaca en el escenario por su espectacular presencia, pero tal vez le falte algo de química con su partenaire o más vigor para ser la estrella indiscutible en las coreografías. El cuerpo de baile se esfuerza al máximo y está integrado por actores y actrices con experiencia en el teatro musical y algunos de ellos son, incluso, profesores de ballet y claqué como la dinámica Evangelina Esteves.

Júlia Ordoñez con el apodo Mary piernas largas que ni pintado!

 Dos de las bailarinas Aina Casanovas y Evangelina Esteves

Los números musicales son muy variados, no tienen conexión unos con otros, y son de diferentes estilos, destacando las piezas “a contratiempo”, “Opa”, y “The railway Tavern”. Algunos son más clásicos pero impecables y en varios de ellos te invade una sensación de déjà vu, como con “Nakupenda Malaika”. En cambio otros, como el Can-Can, siempre tienen el suficiente poder revitalizador y parecen funcionar a medio gas.

Dos destacables números

Por todo esto, sales del espectáculo con una sensación agridulce, a la que no es ajena los constantes giros de la comedia al drama, algo cada vez más común sobre los escenarios.
Moustache, a Rhythm Musical Comedy gustará, por supuesto, a los amantes del claqué de alta calidad técnica, de los musicales aparentemente sencillos y del teatro de humor a la antigua.

“Moustache, The Rhythm Musical” se representa en el Teatro Apolo hasta el próximo 29 de enero de 2017.
Dirección: Coco Comin
Dirección musical: Xavier Mestres
Bailarines: Compañía de Claqué Coco Comin
Escenografía: Paco Azorín
Coreografía: Sharon Lavi y Júlia Ortínez
Producción: Coco Comín
Idioma: castellano
Duración: 165 minutos
Horarios y precios: Web Teatro Apolo