Planeta Cómic desde su sello “es novela gráfica” lanza Nada de Claudio Stassi, adaptación en viñetas de la novela del mismo título de la escritora Carmen Laforet, con la cual ganó el premio Nadal en 1944. Así que aquí tenéis la reseña de este cómic acompañada con el bonus de la charla que se dio en la Fnac, con la presencia de Claudio Stassi y la editora de Planeta Cómics en septiembre del año 2021.
Breve sinopsis de Nada:
A la Barcelona de posguerra llega Andrea desde un pueblo para abrirse futuro como estudiante. La joven aterriza en la ciudad condal llena de ilusión, nervios y esperanza, lo malo es que su familia que la acoge está bastante desestructurada y no reina lo que se dice precisamente el amor y la buena convivencia. Toda su inocencia y candidez quedarán pronto ahogadas por el ambiente malsano, deprimente, opresivo y hasta violento que se respira en casa. ¿Logrará Andrea sobrevivir a tanta negrura, dolor, incomprensión y sobre todo soledad?
En la casa donde ocurre la mayor parte del relato habita la abuela de Andrea con sus tres hijos, Juan, Angustias y Roman, la mujer de uno de ellos y la criada. La anciana madre con un principio de alzheimer es dulce pero no sabe imponerse al mal carácter de sus hijos. Juan está casado con la joven y cariñosa Gloria a la que maltrata. Angustias es una mujer fría, distante, a la antigua y muy severa siempre en riña con todos. Y por último Roman que cada vez que aparece por ahí es para caldear todavía más los ánimos. Andrea irá descubriendo sus roles y forma de actuar, mientras descubre algo de luz y alegría fuera del hogar a través de los grupos de estudiantes y de una amiga especial.
Nada es un drama de aquellos de antaño que nos podríamos encontrar en alguna película española antigua en blanco y negro o incluso en películas más recientes como Alas de mariposa de Juanma Bajo Ulloa, más que nada por el ambiente enrarecido que presentaba este film. En Nada asistiremos a las vicisitudes y las penurias de unos personajes que ocultan secretos y que iremos descubriendo a través de la mirada de Andrea.
Nada es un cómic de atmósfera triste, un melodrama narrado en tono pausado y que gana más leído poco a poco, como si fuera un pequeño culebrón en capítulos. Veremos ese contraste entre la alegría de la protagonista y el infierno en que se mete por culpa de odios, secretos pasados, sentimientos y convicciones de su familia.
Stassi realiza un buen trabajo y nos adentra en este mundo sombrío y real al que muchas mujeres se vieron sometidas en aquellos tiempos. Un cómic oscuro ya en su color y con poca luz para transmitir esta sensación de opresión. Sus dibujos son de trazo muy grueso, con rostros muy expresivos y sin muchos detalles. La narración es pausada con poca acción, unas cinco viñetas por página. Algunas viñetas ocupan media página o son splash page cuando los hechos son duros o destacables. Hay alguna situación que aparece de repente sin introducir y te descoloca un poco, como toda la secuencia en casa de los padres de la amiga de Andrea. Puede que algunos diálogos estén recargados, diciendo los personajes demasiado en tan solo una sola viñeta, lo que se hace extraño y hubiese sido más digerible y fluido repartirlo en varias viñetas con más movimiento de los personajes. Son pequeños detalles que no deslucen la buena realización del cómic.
Si te gustan los dramas con conflictos familiares duros y con mujeres fuertes que hacen lo posible para vivir y progresar en su vida, con Nada de Claudio Stassi tendrás una muy buena y exquisita ración. Y si no, también puedes descubrir un cómic diferente o novela gráfica si te quieres hacer el interesante.
Un tomo en tapa dura muy bien editado con algunos extras finales y un prólogo de Estefanía Molina
PRESENTACION NADA DE CARMEN LAFORET
UN CÓMIC DE CLAUDIO STASSI
El jueves 2 de septiembre de 2021 tuvo lugar la presentación de Nada con Claudio Stassi y la editora de Planeta Cómic en la Fnac de plaza Catalunya. A continuación resaltamos lo más interesante de la presentación, incluyendo algunas preguntas del público presente.
-¿Cómo surgió la idea de realizar este cómic?
En Sant Jordi le regalé a mi mujer Nada de Carmen Laforet. Al acabarlo me dijo que me lo leyera porque era una historia genial que podría adaptar muy bien en viñetas. En la página diez de la novela ya me di cuenta que era una maravilla, muy impresionante. La manera de narrar de Laforet era sublime y muy emotiva. Me gustó mucho. Sabía llevarte dentro de la vida de esta chica, de Andrea, y yo ya visualizaba la casa y la cara de algunos personajes. Con el libro en la mano fui a la editorial Planeta y le dije al editor David Hernando que este quería que fuese mi próximo trabajo.
-¿Cómo fue el proceso creativo?. ¿El diseño de personajes?. ¿Cómo pensaste la Barcelona de aquella época que es importante dentro del relato al igual que la casa?
Decidí usar la misma técnica gráfica que en mi anterior cómic La ciudad de los prodigios de Eduardo Mendoza pero de manera diferente. En La ciudad de los prodigios hay muchos negros, muchas tintas negras, es un cómic muy oscuro para conseguir el reflejo de la ciudad condal de aquella época. En cambio en Nada quería que la linea fuera más protagonista, que los personajes no tuvieran tanto negro en el rostro o en la ropa. Decidí trabajar mucho más el entorno, los personajes con menos oscuridad, como un hilo roto que une a todos los personajes hasta dar esperanza a la protagonista que vive una brillante pesadilla. El color también es muy importante en este cómic consiguiendo que en la casa el ambiente sea asfixiante.
-¿Cómo fue el diseño de los personajes?
Cuando leo un libro y tengo que recrear la cara de los personajes pienso en gente que conozco, si son secundarios, incluso puedo añadir algún personaje con la cara de algún actor o con algún rostro peculiar. En los cómics de la editorial italiana Bonelli se usa mucho esta técnica. Para Andrea diseñe varias caras. Empece con una que tenia demasiada mala ostia, pelo negro, ojos muy grandes, achinados y sí, era guapa, que era la intención pero no reflejaba su carácter. Ya que ella es introvertida, muy dulce, romántica con una luz interior muy potente pero que vive dentro de un infierno con unos familiares horribles que intentan destruir esta luz. Vi una foto de mi madre de joven... Ella tiene un lunar justo encima del labio, incluso yo también. Y a partir de esa foto, me inspiré… El cuello largo, la figura alargada, la timidez en los ojos, la cabeza siempre agachada y sumisa. Con los otros personajes fue algo parecido. El tío era un tío mío que era un hijo de puta e intento presentarlo tal y como era. La abuela es mi suegra, tal como es ella…Luego en el Metro o en la playa dibujo a personas o las miro y retengo, intentando captar la imagen para dibujarla luego, porque hay personas que tienen una expresión que es muy interesante. Captó su morfología, su nariz, su boca...
-¿Cómo dibujaste la Barcelona de aquella época que es importante dentro del relato?
Tendrían que darme un título de historiador de Barcelona de la época. Sé decirte exactamente donde hay cosas que ya no existen. Portaferrissa se llama así porque antaño había una puerta de hierro en ese lugar. Plazas, por ejemplo el puentecillo de la Catedral del Mar que ya no está. Un montón de lugares de los que se pueden consultar fotografías, grabados, dibujos, videos y que puedes recuperar para documentación y dibujar correctamente. En esto soy muy tiquismiquis, para mi la documentación es fundamental cuando estás narrando algo de época. Tiene que ser exactamente como era. Si fallas en algo es un grandísimo error. Hay que tener cuidado en esto.
-¿Cómo pasas de una novela al lenguaje del cómic?
Hago lo contrario de lo que le digo a mis alumnos. A ellos les digo que tienen que hacer el guión y todo tiene que ser perfecto, el storyboard… A veces lo hago, pero no lo utilizo. A mi me gusta mucho improvisar. Cuando realizo una página en la que tengo que dibujar una serie de cosas empiezo a pensar ¿por qué tengo que contarlo de esta manera? Y empiezo a improvisar, ¿y sí esto lo modificó así, o lo cambió? A veces tiro a la basura días de trabajo porque la improvisación no funciona, pero cuando lo hace me llena. Lo que hago es leer la novela, la terminó y la vuelvo a leer anotando todas las partes que he de dibujar. Las voy separando y agrupando en varios capítulos. Luego hay partes del libro que considero se pueden modificar aunque en este caso la novela era muy visual y he sido muy fiel, la he respetado bastante. En cambio en La ciudad de los prodigios le quité el final, ya que para mi había una lógica para hacer esto. Mendoza es un gran narrador y coloca mucha ironía que en ese género negro puede funcionar si se hace de una determinada manera, pero personalmente no me gustaba y decidí quitar toda la parte irónica y quedarme con la parte que los franceses llaman polar. La parte final era grotesca y me dije: ¡fuera! En Nada en cambio es todo emocional, una explosión de emociones de todos los personajes y he sido bastante respetuoso con la novela.
-¿Cuál es tu método de trabajo?
Trabajo en un estudio y somos unos siete dibujantes de cómic y entre todos, aparte de decirnos palabrotas y tirarnos cosas como los niños pequeños que somos, hablamos de lo que estamos haciendo y pedimos la opinión. O incluso haciéndonos fotos para captar la postura como referencia, a veces nos tumbamos en el suelo para desbloquear alguna perspectiva difícil. A través de otros compañeros también se ven los propios errores. Pero cuando me bloqueo en una narración lo que suelo hacer es tomarme un café y parar. Aunque siga dibujando con la mente. También va bien dejarlo todo y al día siguiente ver los errores o ver cómo solucionarlos. Un truco es mirar el trabajo al revés o a contraluz.
-¿Cómo fue la creación de la portada?
Algo rarísimo. Al terminar el libro le di un boceto de la misma al editor diciéndole que esta iba a ser la portada. Todo muy rápido. Al terminar el libro me surgió esta imagen en la cabeza, y no es una escena que pase en la novela. La idea era ¿quién soy? El gesto de mirarse al espejo quitando el vaho en la intimidad, este es el núcleo de todo el libro .
Hay mucha gente que afirma que este es el primer libro feminista de la historia de la literatura, no soy critico literario, pero sí que contiene un punto de feminismo sano y puro.
-¿Y sobre el tipo de narración?
Decidí usar la narración al estilo manga, muy lenta, de gestos, silencios, dibujar algunos objetos en concreto... Quien me conoce sabe que yo y el manga no vamos muy de acuerdo, pero hay algunos autores que me encantan y saben usar muy bien la narración como Billy Bat de Naoki Urasawa. Decidí usar este tipo de narración que no había usado hasta ahora y dar buenos golpes de efecto en algunos momentos concretos con splash pages en el que casi son caras.
-¿ Empiezas siempre por la primera página o vas alternando?
Yo lo hago lineal. Soy dibujante pero también soy lector. Es fundamental parar y leerlo para saber si funciona. Un dibujante italiano me enseñó que cuando terminas un capítulo es mejor dejarlo reposar un día y luego leerlo. Si no funciona lo notaras. La última página es la última que hago. No te digo que algún día use el método salteado.
-¿Por qué se llama Nada la novela?
La autora no explica porqué se llama así, mi interpretación es que cada vez que pasa algo, que hay algún problema, si te preguntan qué te pasa, sueles responder nada, todo bien…. A la protagonista le pasa muchas veces, que le preguntan ¿Cómo estás ? ¿Cómo va? Y ella responde todo bien… nada… Creo que es una expresión para esconder el dolor de lo que está viviendo.
Para acabar quiero decir que este cómic se dibujó durante la pandemia, para mi también fue emotivo y por eso en los agradecimientos está una dedicatoria todo el personal sanitario.
Claudio Stassi ha publicado su arte en diversas editoriales. Ha trabajado en series de cómics italianas como Dylan Dog y Dampry. Ganó diversos premios en 2007 con Historias de la mafia cotidiana con guión de Giovanni Di Gregorio. Sus dibujos se han visto en cómics como Por esto me llamo Giovanni, La Banda Stern o Rosario amor y muerte. Con Planeta Cómic ha transformado en viñetas las novelas La ciudad de los Prodigios de Eduardo Mendoza y la que nos ocupa Nada de Carmen Laforet. Stassi también es profesor de la Escuela Joso en Barcelona. Recientemente ha publicado otra adaptación de una novela: Los pacientes del doctor García de Almudena Grandes.
NADA de Carmen Laforet
Un cómic de Claudio Stassi
Editorial: Planeta Cómic
Colección: Novela gráfica | Serie Adaptaciones literarias
Número de páginas: 208
PVP: 25€
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