Nos ha dejado Antoni Bancells. El dibujante inició su carrera en el mundo de la historieta con tan solo veinte años. Estuvo un tiempo en la gigante Bruguera, donde sufrió en sus carnes su sistema de trabajo y las incongruencias de la férrea dirección. Allí creo a Mustafín (1969), Pipo y Colas (1970) y Sindulfo el terrible (1971). Las únicas historietas en las que pudo estampar tu firma, porque Bancells dibujó también a Doña Urraca, Mortadelo, Reporter Tribulete o Heidi, lógicamente de forma anónima. Después trabajó creando páginas de Donald, Tío Gilito y compañía en el mundo de los cómics Disney, en los cómics de la niña Bibi Blocksberg, y también dibujando páginas cómics de los Playmobil con los que muchos hemos jugado alguna vez. Bancells dotaba a estas páginas playmobil de movimiento y acción algo muy difícil al ser unos juguetes con pocas articulaciones. Aún hoy seguía trabajando en los cómics basados en estos juguetes y que aparecían en diversas revistas de kiosko, tanto aquí como en otros países. Gracias por entretener con sus dibujos a muchos niños y jóvenes de diferentes países. Descanse en paz.
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