Juan Carlos Ramis fue un fichaje todoterreno en la muy aceptable y corta etapa en que Ediciones B decidió volver a lanzar las míticas cabeceras juveniles en los kioskos en 1986. Poca broma que para el retorno de Mortadelo, Zipi y Zape, Superlópez y sus derivadas hasta se realizó un anuncio en televisión. Aunque al principio el contenido fue titubeante y apócrifo, pronto ganó en calidad en parte gracias a los nuevos valores y los ya consolidados.
Ramis aportaba muchas historietas dibujadas con cierta rapidez y economía de detalles, pero con unos guiones a veces tan tontorrones, imaginativos, surrealistas y pasados de vueltas que nos provocaban la risa. El autor tiene una buena inventiva y supo contar historias y chistes gráficos más novedosos y atrevidos. Cuando cuidaba sus ilustraciones salían muy bellas. (Ver algunas contraportadas del TBO). Y además su dibujo podía presentar estilos muy diferentes.
Realizó una sección a partir de 1987 en la revista Pulgarcito y Superlópez titulada Personajes de película / personajes en su salsa / los super Monigotes. Un personaje a página entera en clave de humor. Este apareció en un especial navideño de Mortadelo en 1987.
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