El pasado mes de septiembre se llevaron a cabo las séptimas jornadas de cómic y autoedición de Barcelona más conocidas como Kboom!. Durante dos días jóvenes promesas junto a otras más veteranas muestran sus trabajos en el difícil mundo del cómic. Un evento cada vez más popular y en el que el LGBT es muy visible. Las jornadas cuentan con conferencias y talleres. Lamentablemente esta séptima edición se ha comunicado que ha ha sido la última de Kboom!. Básicamente debido a que los organizadores, como es normal en un evento que cada vez se ha hecho mayor, están algo quemados. No ha habido subvenciones, en cultura ya se sabe. Un proyecto de esta envergadura requiere mucho tiempo, amor por el cómic, preparación durante todo el año y además todo autogestionado. Han sido 200 invitados, unos 15.000 visitantes, 150 actividades y 600 stands en estos largos siete años. Una pena este final pero así son las cosas. La pasión y el trabajo crean estas cosas maravillosas pero las personas también tienen derecho a descansar y más si es por amor al arte.
En esta entrada podremos leer lo mejor de la conferencia Ciencia-ficción y Terror Distópico.
La conferencia estuvo moderada por Rocío Vidal, una de los motores de este evento y contó con los siguientes autores:
Víctor Araque: Después de ganar varios premios en concursos de dibujo comienza a colaborar en revistas como Dos veces breve, La parada Magazine y Amaníaco. Realiza historietas cortas e ilustraciones. La primera novela gráfica llega con El código del ciempiés junto con el ilustrador y escritor Joaquín Rosado y la ilustradora Rocío Estepa. Su trabajo más reciente y en solitario ha sido Buckson, una historia de ciencia ficción y terror muy recomendable.
Laura Pérez: Ilustradora que ha publicado en múltiples editoriales españolas e internacionales. En 2015 obtiene con la historieta Empatía el primer premio Valencia Crea. Realiza también diferentes historietas cortas para varias publicaciones. Su primera novela gráfica con guion de Pablo Monforte es Náufragos. Y ya en solitario publicó Ocultos (2019).
El Torres: Casi no necesita presentación. Es uno de nuestros guionistas mas prolíficos con obra publicada en Francia, Alemania, japón y Estados Unidos. Sus historias de suspense y terror como El Velo, El bosque de los suicidas, Camisa de fuerza, Las brujas de Westwood, entre otras, son de lo mejor en este género. Pero en cualquier temática a la que se enfrenta sale airoso, ahí esta la divertidísima serie Bribones o la ida de olla que es Nancy Hell. Hombre muy polifacético pues a finales de 2012 fundó el sello Amigo Cómics para publicar directamente en Estados Unidos y no era esta su primera aventura editorial, pues en su inicios se convirtió en uno de los directores de MegaMultimedia. Recientemente publica comics en grapa bajo su sello Karras
En esta conferencia se habló en general de los cómics de terror y de las sensaciones que provocan. Como era más una charla, he separado un poco las disertaciones de las preguntas, las cuales puede que no se llegaran a formular así. Pero he aquí lo más interesante:
LA NOVENA MESA:
CIENCIA-FICCION
Y
- ¿Puede dar miedo la lectura de un cómic de terror? ¿Que tipo de terror gusta más?
El Torres: El cómic no asusta, no puedo darte un susto, esa sensación de golpetazo. Que abres la puerta y aparece un Alien… Podemos simularlo…, Miedo creando tensión. Podemos ficcionar, pero cuando abres un tebeo tienes una visión del pasado, del presente y del futuro al momento. No puedes asustar con sustos pero sí con ambiente, con atmósfera, con elementos extraídos de la realidad que se que te van a inquietar. Tienes que asustar con ambiente y que el lector aporte tanto o más que el autor. Tampoco podemos competir con la generación de los videojuegos, ¿
Que zombi vas a dibujar que dé miedo?… En los cincuenta si que en la
EC Comics impresionaba.
Laura Pérez: El cómic lo que ha de hacer también es plantear preguntas, plantear dudas. No puedes generar sustos como en el cine, pero sí puedes generar preguntas. Y puedes asustar con el mero hecho de planteártelas. Tendemos a creer o no creer según nuestro contexto y lo que filtramos de la realidad. Creo que el cómic que da miedo es aquel que realmente te hace pensar, analizar la situación y enfrentarte a tus miedos y a otras cosas distintas. Podría ser más terror psicológico. Se pueden plantear muchas cosas.
Víctor Araque: Está claro en le cómic no se puede dar miedo pero sí que hay algo que se puede utilizar que es la empatía. Si la logras provocaras sensaciones. La empatía también hace preguntarte ¿qué haría yo si me pasase eso? y piensas el miedo que tendrías tú mismo. Si te sientes identificado funciona, o si te caen bien los protagonistas te hará sufrir. Por eso funcionan también con las distopías en un futuro cercano. El ¿y si?… funciona. En mi cómic Buckson, los médicos en vez de utilizar material quirúrgico para las operaciones utilizan seres vivos. Ahí ya hay un punto de futuro pero puede ser cercano.
Páginas de Buckson
Laura Pérez: Ese tipo de terror nos gusta porque no nos gusta que nos pase a nosotros, nos gusta que les pase a otros. Cuando en una película están destripando a alguien, todo el mundo tiene esa parte oscura. Que no queremos que se sepa y más si te puede condicionar socialmente, y más en el mundo en que vivimos con tantas cosas que no se pueden decir ni hablar sobre ellas.
¿Qué pasa con la ciencia-ficion y el terror? Que ahí aparecen. Mira lo que le está pasando a esa chica, pero es una desconocida y no me esta pasando a mí. Ese tipo de cosas gustan a las personas. Ya pasaba con los gladiadores
¿por qué le gustaba a la gente ver matar a otros? ¿Son todos unos sádicos? ¿El morbo? ¿El fetichismo? Son muchas cosas. El terror siempre mueve a la gente. Nos gusta ver cosas en plan románticas pero también
La matanza de Texas, porque son incorrectas fuera de nuestra visión moral.
¿Por que Midsommar esta gustando tanto? Por el morbo, porque nos gusta que alguien lo explote. Son cosas que sabemos que no son correctas y si están pasando fuera de nuestra rectitud moral, mola.
-¿Cual es la diferencia entre el tebeo y el cine de terror ?
El Torres: El terror en el cine es una experiencia compartida. Todos están experimentando las mismas sensaciones. Un tebeo de terror es una experiencia más íntima. El autor cuenta una historia y el lector la interpreta. Los medios para provocar esas sensaciones son completamente distintos. Son más limitados pero al ser una experiencia más íntima, podemos marcar pautas, si uso pequeñas viñetas el tiempo ira mas lento, si uso un gran dibujo sera un momento más impactante. Siempre he pensado que leer un tebeo es como un baile y el autor ha de bailar bien con el lector, llevarle de la mano.
- ¿Se siente a salvo el lector?
El Torres: Siempre lo estará. Siempre puede cerrar el cómic. Tampoco hay explicarlo todo al lector. Hay que dejar al lector que adivine cosas. Al lector le gusta adelantarse. Hay que darles recompensas, sin desvelarle quien es el asesino. El psicópata que tenemos dentro espera que vayan a suceder ciertas cosas, en las películas es más habitual y juegan con los tópicos. Sabías que este iba a morir y muere…
Laura Pérez: También a veces, en plan más experimental. Puede ser una colección de momentos extraños y que te incomodan y eso ya es un reto. Ha de haber un guión siempre pero también es a veces necesario disfrutar de eso momentos que no llevan a ninguna parte. A veces se incluyen en historias largas momentos inconexos o incongruentes totalmente. Y ya nos sucede en la vida real, tenemos un guión de todos los días pero a lo largo del tiempo suceden cosas inconexas que son las que nos descolocan. Jugar con eso en la narrativa del cómic es interesante.
El Torres: Sí, pero el lector siempre va a buscar patrones.
Laura Pérez: Sí, necesitamos que ocurran cosas.
Magnifico dibujo de Laura Pérez
Rocío Vidal : Ahí tenenos
El Caminante un manga seinen del japonés
Jiro Taniguchi en el que solo aparece un hombre caminando...
Víctor Araque: Está claro que el lenguaje del cómic te permite cosas como El caminante y muchas más. Puedes jugar con el lenguaje y comunicar cosas. Te puedes cargar el patrón de desarrollo, nudo y desenlace pero siempre están y sí, puede haber escenas inconexas pero el lector elegirá determinadas escenas e imágenes para construir el relato. Yo doy clases y mis alumnos están mas cerrados a lo que es la narrativa mas experimental.
Laura Pérez: Puede haber una coherencia dentro de la incoherencia porque el lector quiere sentirse satisfecho de lo que ha tenido en las manos. Debe de haber una conexión en esa incoherencia para sentir que ha valido la pena.
-Cuales son los detonantes del terror?
El Torres: Stephen King es el rey en crear un entorno cotidiano e ir soltando semillitas. Del entorno ordinario te suelta algo extraño que crea ondas… Y todos los patrones que has aprendido de esa gente que vive en el pueblo se desmorona. Te rompe los esquemas. Te hace plantearte ¿cómo podría reaccionar yo?
Víctor Araque: El director David Cronenberg juega también con lo cotidiano, provoca pánico y es un adelantado a su tiempo. La película Videodrome es inquietante y sales con muy mal cuerpo y es lo que es Internet ahora. Cuando en lo cotidiano aparecen cosas anormales se crea el terror. En la película Robocop cuando el robot grande que está intentado matarlo cae, este empieza a llorar como un bebe. Esa escena, al ser dos elementos distintos, un robot gigantesco llorando como un bebe, se te queda grabada y me producía pánico porque te descolocaba.
El Torres: Me gusta Cronenberg porque plante distopías pero no tienen la moralina de algunos relatos como Black Mirror.
Rocío Vidal: Cuando hay un malo que es un cabronazo quieres que muera de la peor manera y cuando eso no sucede te provoca una frustración y sensación de terror que a mí me gusta también.
Víctor Araque: Sí, pero a veces se le da vuelta, sobre todo en las series, ahí está Tony Soprano que es un cabronazo pero te crea tanta empatía que tu no quieres que le pase nada malo.
Laura Pérez: También mola cuando el bueno no es tan bueno y viceversa.
-¿Cómo se crea la atmósfera adecuada en un cómic de terror?
El Torres: Hubo un cómic que a mí aterrorizaba, La tumba de Drácula del dibujante Gene Colan. Ahora queda muy kitch. Pero el primer episodio está dibujado con una maestría absoluta. Es puro terror gótico. La manera de representar a ese personaje te hace empatizar, tú no sabes de que lado ponerte. La maestría de Colan es que jugaba con la oscuridad, con los tonos negros, con la capa de Drácula. Todo era muy saturado, pero te detienes en una viñeta y la sacas de su narrativa y la viñeta es terrorífica. Para mí una de las grandes viñetas de terror es cuando Drácula se ha despertado y sale de la tumba, oigo hasta los ruidos, su media cara medio iluminada es tan potente y sin ser nada innovador. A veces es un cliché pero bien llevado provoca también miedo y sensaciones potentes. No hace falta que salga un teléfono móvil asesino. Esa anticipación del monstruo es magistral.
Laura Pérez: Se pueden contar cuentos tradicionales de forma diferente. Pero hay siempre referentes que dan miedo, aunque se cuente de forma innovadora
El Torres: En el cómic podemos jugar con algo que el cine no puede jugar que es con escenarios totalmente claros, el cine necesita jugar con la oscuridad para crear esa atmósfera. En el tebeo podemos situar la acción en un hospital totalmente iluminados y podemos crear esa sensación de desazón ya con la experiencia intima entre el lector y lo que pasa. El miedo a la oscuridad es uno de nuestros miedos atávicos pero en el tebeo podemos subvertir esto.
-Los objetivos narrativos son diferentes en el cine y cómic los sonidos, ambiente audiovisual nos va a generar pesadillas en una película pero no se puede trasladar al cómic...
El Torres: Si que se puede. Si yo en una viñeta no pongo el click del gotear de un grifo, el lector lo oirá igualmente.
Víctor Araque: Yo no utilizo onomatopeyas en mis cómics.
Laura Pérez: Yo tampoco pero sin embargo en el cómic puedes quedarte más tiempo con una imagen que en cine no puedes. Puedes observar mas tiempo esa imagen sencilla o compleja y te puede dar miedo. En el cine no puedes. No tenemos el sonido, pero podemos parar el tiempo. El dibujante puede jugar con eso, con viñetas pequeñas y grandes. Jugar con el tiempo.
-¿Escribís sobre los que angustia para neutralizar vuestros miedos internos?
El Torres: siempre que escribes sobre terror, escribes sobre cosas que te inquietan. No puedes decir voy a buscar un miedo general. Yo he tenido parálisis de sueño y he visto gente viniendo hacia mi cama, pienso cojo esto y lo voy a trasladar al cómic. Así será una experiencia mucho más realista. Puedes escribir sobre las sensaciones. Toda la parte de creación nace de tus sensaciones a la hora de escribir o de dibujar… Si no has tenido una experiencia interna, de primera mano que te ha inquietado no podrás escribirla bien.
Víctor Araque: Cuando tu cuentas tus inquietudes la historia gana.
Laura Pérez: Dependiendo del miedo que quieras crear, tiene que haber cierta naturalidad. En el cómic sea de miedo o no, siempre ponemos una parte de nosotros, lo que nos inquieta, lo que nos hace sentir incómodos o no. Por eso nos gusta más un autor o otro, dependiendo de sus inquietudes. Tenemos que escribir un poco de lo que nos gusta.
-Creo que la honestidad a la hora de contar historias hace que esas historias sean más creíbles y mejores. La honestidad como dar mas de ti cuando estas contando esa historia, y menos del estereotipo X. Por eso los clichés nos aburren, porque no vemos autenticidad. Quizá hace cincuenta años algo muy teatralizado estaba muy bien. Pienso que hay que aportar esa parte de vosotros mismos para conseguir que nos lo creamos.
El Torres : Ahí puede estar el monstruo como metáfora. Todos los monstruos que hemos tenido sobre todo clásicos son metáforas de realidades. El Hombre lobo metáfora de la bestia que llevamos dentro, el vampiro del ser solitario, el zombi de formar parte de cosa sin mente, sin ningún control. Son una parte de nosotros que quizá ahora sean metáforas muy evidentes pero cuando la explosión victoriana eran revolucionarios.
Laura Pérez: Hablando con médiums me dicen que el cine ha hecho mucho daño porque todo el mundo tiene miedo a los fantasmas y ellos piensan que los fantasmas no vuelven para hacernos daño. Es otra perspectiva de gente que trata estos temas. Pero claro, si te pasa algo paranormal en tu casa lo más normal es que sea algo de tu imaginación… Pero ¿y sí no? Y eso plantea siempre mas miedo. Lo importante es contar historias en cualquier ámbito en le cine, en el cómic, en los videojuegos...
Preguntas del Público: ¿Que es le terror de frigorífico?
Rocío Vidal: Es un termino que se aplica para aquel terror que en el momento de verlo dices, bueno esta bien y ya esta, pero cuando terminas la historia sea cine, novela o cómic se queda dentro de ti. “En la nevera” y al día siguiente empiezas a planearte cosas que ni sabias… No se va…
Público: ¿El miedo a cosas reales da más que imaginarte una mañana futurista?. En la película Session 9 estaban investigando una cintas de audio de una chica internada que era bipolar, no había nada de miedo pero empezaron a descubrir unos tratamientos en el sanatorio muy tétricos y eso daba mas miedo
El Torres: Hay miedos básicos, y concretos a la enfermedad, la muerte, la vejez, la locura, a la dominación el dolor… Terrores concretos que tu puede extrapolar a cualquier cosa y en cualquier contexto. En el espacio, o donde sea. En el futuro o en el pasado. Si buscas siempre están algunos de esos ingredientes en el terror. Según la sociedad se tratan de una forma u otra.
Laura Pérez: El terror del control mental al pensar que te podía llegar pasar a ti. Las personas que consiguen que otras hagan algo anulándolas también nos fascina. El poder de los gurus de las sectas.
Víctor Araque: La demonización de la cosas como las redes sociales, de tu familia, todo se puede extrapolar al terror.
-¿Que cómics de terror os han gustado mas?
Víctor Araque: Uzumaki de
Junji Ito
El Torres: yo soy mas clásico Drácula de Wolfman y Colan también por la nostalgia. Y volviendo a los orígenes pues los cómics de la EC. Todos los recursos del cómic de terror que seguimos usando y en todos los idiomas ya lo explotaron los genios que trabajaban en esos cómics. Esas venganzas, esos dibujos preciosos, quizá ahora sean muy saturados y con mucho texto, pero yo recomendaría acercarse a estos clásicos y conocerlos para darse cuenta que no hemos inventado nada.
Laura Pérez: Mi amigo Dahmer de
Derf Barckderf. No hay muchos cómics que se planteen la mente de un psicópata
(El carnicero de Milwaukee) y ademas con un aspecto tan infantil