lunes, 6 de octubre de 2025

Crítica teatro: Del fandom al troleig: una sàtira del bla bla bla - Sala Beckett / Barcelona

 

Una madre obliga constantemente a su hija a ser la mejor en las disciplinas escolares, sin dejarle apenas espacio para respirar, equivocarse y ser ella misma. Una infancia en la que crece sin ser feliz. Ahora ella, Paola Miró, ya es una joven y una famosa ciberactivista, muy inteligente, pero vive angustiada y deprimida, y por ello ha decidido convertirse en una “tonta” para no sufrir. Y lo intentará con un método bastante drástico. Por otro lado, tenemos a Ximena White, una reconocida guionista y directora que quiere realizar un documental sobre Paola Miró, con un enfoque comercial pero también innovador.

 Esta es, a grandes rasgos, la sinopsis que se nos presenta como espectadores de Del fandom al troleig: una sàtira del bla bla bla, una obra bastante inclasificable. A partir de estos pilares argumentales, se suceden una serie de situaciones algo inconexas y cada vez más alocadas, verdaderamente chocantes, que en un primer momento pueden parecer fuera de lugar. Sin embargo, si uno se deja llevar por las distintas piezas, aunque no llegue a entender del todo el hilo narrativo, se encontrará con una comedia divertidísima, sin tregua, con la que reirá a gusto.

Berta Prieto es la autora de esta obra indescriptible. Tras el éxito de la obra de teatro Derecho a Papeleta y su participación como actriz y coguionista en la serie de television Autodefensa, Prieto aterriza en la Sala Beckett de Barcelona con el retorno de Del fandom al troleig: una sàtira del bla bla bla.



La obra está interpretada por Belén Barenys , también cocreadora y protagonista de la serie  Autodefensa, ademas de cantante y escritora, Roser Dresaire, Irene Moray, que ademas es directora de cine y fotógrafa, y Laura Roig: un cóctel de artistas jóvenes con ímpetu, valentía y una profesionalidad admirable. Sangre nueva y vital para un teatro atrevido y sin cortapisas. Actrices vigorosas que dominan tanto el drama como la comedia y el musical, como nos lo demuestran en esta obra. Y, además, con el plus de estar acompañadas por la veterana Mireia Portes, una actriz insuperable en el registro cómico. El humor llega, por momentos, a rozar el absurdo: en una escena, Portes, quien interpreta, entre otros papeles, a la madre de la protagonista, comienza a hablar en auténtico ruso, recitando porque sí, un pasaje de La Gaviota de Antón Chéjov. Lógicamente, a menos que sepas ruso, no entenderás nada… ¡pero te vas a desternillar igualmente! y por cómo se mueve y actúa sobre el escenario. Es aún más admirable si se considera que ha tenido poco tiempo para preparar el personaje, ya que este papel lo interpretaba anteriormente Judit Martín, otra gran cómica.

Tal vez, debido a la edad de las intérpretes y a la diversidad temática, la narrativa del montaje parezca destinada a un público joven. De hecho, la sala estaba abarrotada de espectadores de la Generación Z. Sin embargo, yo no pertenezco a esa generación... ¡y la disfruté muchísimo!


La obra transita por múltiples temas: el ego de los artistas, el periodismo y los entrevistadores, el mundo del cine, la televisión y los premios…  De hecho realidad y ficción se mezclan pues la propia Irene Moray ganó un Goya en 2019 por su cortometraje Suc de síndria. También aborda la opresión social que empuja a ser perfectos, la sobrecarga de actividades en niños y jóvenes, que apenas tienen tiempo libre, el deseo de encontrar el propio camino con rebeldía, la pareja, la superación individual, el conflicto de expectativas con los padres, y la necesidad de atreverse a perseguir metas, retos, anhelos ocultos o simplemente aquello que te gusta.

Uno de los momentos más surrealistas es un ensayo-encuentro en clave de cinéma vérité, en el que la directora y las intérpretes hablan sobre la obra y comentan lo que les gustaría llevar a escena, lo que de repente da sentido a algunas de las escenas que han desfilado previamente ante nuestros atónitos ojos.

El decorado es muy funcional, pero también ágil y cambiante, con poco atrezo. Todo sucede a gran velocidad, al ritmo de una función dinámica que no da respiro.

Con Del fandom al troleig: una sàtira del bla bla bla, lo mejor es dejarse llevar por esta comedia con toques de drama y musical, en la que de repente tanto te hablan en ruso como en ingles.  Y aunque llegue un punto en el que puede que ya no sepas de qué va la caótica trama... ¡te lo pasarás igualmente en grande!

DEL FANDOM AL TROLEIG: UNA SÀTIRA DEL BLA BLA BLA - Sala Beckett
Fechas: Del 17/09/2025 al 19/10/2025
Horario: De miércoles a sábado, 20 h Domingo, 18:30 h
Duración:1 h 40 min / Localidades no numeradas y sin respaldo
Precio: aprox 22€ 

Autoría y dirección: Berta Prieto 
Reparto: Belén Barenys, Roser Dresaire, Irene Moray, Mireia Portas y Laura Roig 
Escenografía: Paula González 
Iluminación: Gabriela Bianchi 
Vestuario: Chloe Campbell 
Sonido: Iker Rañé 
Música original: Belén Barenys
Producción musical: Núria Barrientos
Vídeo: Víctor Diago
Caracterización:
Sandra Tosca
Asesoría de movimiento: Alba Sáez
Fotografía: Celina Martins y Eduard Sales
Ayudante de dirección: Lola Rosales 
Estudiante en prácticas: Sofía Godoy

domingo, 5 de octubre de 2025

Crítica teatro: Compto cada passa meva sobre la terra con Oriol Genís - Sala Atrium - Barcelona

Un hombre mayor espera en la habitación de un hospital una delicada operación de corazón que se realizará al día siguiente. Su compañero de habitación es, por casualidad, un antiguo cliente suyo: un hombre de negocios que solía comprarle el diario, ya que él ha trabajado toda su vida como quiosquero y tiene buena memoria para las caras. En la antesala del incierto resultado de la operación, el quiosquero se abrirá y le contará casi toda su vida, con sus luces y sombras.

Compto cada passa meva sobre la terra es una obra de carácter sobrio. El veterano actor Oriol Genís se desnuda en cuerpo y alma en este monólogo, a ratos triste, a ratos alegre, a veces melancólico, otras veces frustrante, y cargado de arrepentimiento. Es la historia de su vida: su relación con su padre, el trabajo que este ya ejercía como quiosquero y que él continuó; su atracción por el mundo del circo, y cómo se enamoró de una trabajadora del mismo… Es como si nos contara su vida a nosotros, como si fuéramos aquel cliente de antaño. Y Genís la transmite con naturalidad, de manera reposada y sencilla, sin aspavientos ni florituras: resulta creíble desde sus primeras palabras.

Chapó para el actor, para la dirección de Xavier Albertí y para el texto de Lluïsa Cunillé. Director y dramaturga han colaborado en más de veinticinco producciones, por lo que la obra está perfectamente engrasada. Genís fluye con soltura y da una increíble pátina de realidad a sus historias. Él no ha hecho grandes gestas: es un hombre anodino, pero su vida nos atrapa igualmente, recordando los tiempos pasados con ese poso de nostalgia con el que todos podemos identificarnos.

La vida pasa rápido, es un tópico, pero el quiosquero nos lo recuerda. Incluso las personas más insignificantes tienen sus demonios interiores, esas cosas ocultas que no se atrevieron a enfrentar, aquello que dejaron de hacer… Una vida sin grandes hazañas, pero llena de confesiones ocultas. También nos muestra una sociedad pasada que reprimía y cortaba las alas a las mujeres mucho más que ahora.

Un monólogo muy íntimo que engancha con un aire monótono, pausas bien medidas, sin exclamaciones exageradas ni grandes movimientos para captar la atención del público. Genís se defiende solo con la calidad de su voz, una cadencia constante y una simple bata de hospital. Al fondo, tan solo una camilla y una casi oscuridad que lo envuelve todo...

Si cuando leas esto la obra ya no se está representando en la Sala Atrium, acude, si puedes, allá donde se represente. Teatro dramático, natural, sensible y bien ejecutado. Una pieza que apuesta por la introspección y la verdad emocional.

Compto cada passa meva sobre la terra - Sala Atrium 
Del 16 de septiembre de 2025 hasta 5 de octubre de 2025 
Entradas a partir de 18 €

Interpretes: Oriol Genís
Compañía: Teorema Teatre
Dirección: Xavier Albertí
Autoría: Lluïsa Cunillé
Ayudante de dirección: Mia Parcerisa
Fotografía: May Zirkus
Producción: Teorema Teatre, Festival Grec de Barcelona / Ajuntament de Lloret de Mar
Producción ejecutiva: Maria Andreu