El Vecino es un cómic creado por el guionista Santiago García y el dibujante Pepo Pérez en el año 2004. A lo largo de cinco años se publicaron tres historias largas y poco más de 15 historietas cortas. El Vecino nos adentra en el vivir cotidiano de un joven llamado Javier que puede ser superhéroe gracias a unas pastillas que lo transforman en Titán. La gran baza de esta serie es su cotidianidad, pues podría pasar en cualquier barrio de una gran ciudad de España. El mejor amigo de Javier, es José Ramón, que estudia oposiciones y lleva una vida tranquila hasta el momento de conocer el secreto de Javier. Ambos tienen problemas con las mujeres, el trabajo, el dinero… El cómic trata temas presentes en algún momento de nuestras vidas: la soledad, el valor de la amistad, no afrontar los problemas de cara, la rutina…
Pepo Pérez lo explicaba mejor en la Guía del Cómic: "El Vecino son la excusa para hablar de otras cosas, temas humanos universales (…) el autoengaño y las fantasías personales para rehuir la vida real, el contraste entre los sueños personales y la realidad, las vidas equivocadas, las crisis y el miedo al cambio vital (...), las adicciones, la soledad, la alienación, la incomunicación, el intento de conquistar a la persona de la que crees estar enamorado... En fin, nada original, son temas universales, la cuestión es el enfoque personal que tú intentas aportar para tratarlos”
Los creadores presentaron estas historias de una forma muy personal y a veces muy experimental, sobre todo en las historietas cortas que se publicaron en la revista mensual El Manglar entre 2007 y 2010. Por cierto, El Manglar fue uno de los últimos intentos de revista mensual de cómic variado.
El Vecino nos presenta unas aventuras un tanto melancólicas o tristes, pero sus tres primeros tomos son bastante diferentes de contenido e incluso formato. El primer tomo de la serie era la presentación y la observación en clave de comedia "realista" del posible mundo de un superhéroe en España, el segundo es más aventurero y el tercero, todo un torrente de relaciones humanas cotidianas pasando por una porción de la vida de los personajes que podría ser similar a la de cualquier persona normal. Ni que decir que a cada historia se han ido añadiendo nuevos personajes.
Poco imaginaban Santiago García y Pepo Pérez en aquel lejano año 2004 que su costumbrista cómic de un superhéroe muy de estos lares acabaría convertido en una serie para televisión. Netflix estrenó en 2019 la primera temporada y la segunda en 2021. La serie dirigida por Nacho Vigalondo es una adaptación libre del cómic aunque manteniendo algo la esencia de los personajes principales. Quim Gutiérrez está genial como ese joven de trabajo precario, algo jeta, pero muy en el fondo de buen corazón, que se convierte, con esa forma impostada de expresarse, en Titán. Adrián Pino se parece mucho al José Ramón del cómic. Clara Lago tiene dotes para estos papeles alocados. La serie de televisión va por los derroteros más de comedia y la segunda parte es algo más absurda, rocambolesca y sin mucho sentido, pero que no deja de ser un buen divertimento tontuno que te hará pasar un buen rato. Una serie recomendable en este sentido.
Debido a esta serie de televisión, la editorial Astiberri que publicó el cómic anteriormente, lanzó una nueva edición llamada El Vecino: el origen, conteniendo las tres historias largas y en otro tomo titulado El Vecino: Historias, todas las historietas cortas y algunas nuevas. Los dos tomos en tapa dura, gran tamaño y un montón de extras.
Como hemos dicho las historias cortas eran todavía más experimentales, sin seguir ningún patrón establecido e independientes entre sí. Lo bueno de este tomo El Vecino Historias es que ambos autores en los extras, comentan estas historietas, una a una, situándolas en el contexto de sus propias vidas, ideas, o técnicas que usaban en aquellos días. Enriqueciendo con ello la lectura y en algunos casos valorándolas mejor.
Hay una titulada “Mi padre fue un gran superhéroe” que me ha llamado la atención por lo que explica en los extras del tomo Santiago García, adjuntando una parte de una entrevista que le realizaron en la revista el Manglar n.º 11. En un día como hoy que yo cumplo años y que parece que cada vez pierdo más cosas en mi vida, este texto relacionado con El Vecino y en particular con la vida, me ha llegado y cuánta razón tiene Santiago García. De hecho esta entrada esta motivada por que me ha gustado este texto de García en un día como hoy:
¿Cuál es el centro emocional de la tercera entrega de El Vecino?
Aunque nunca se definan de forma expresa, veo a los personajes en ese momento de la vida en el que uno tiene casi 30 años y comienza a darse cuenta de que se acaban cosas que pensaba que iban a durar para siempre, donde debe renunciar a cosas que creía resueltas y se encuentra con más dudas que cuando era adolescente. Creo que siguen en esa especie de perplejidad o desconcierto similar a cuando todos creíamos que íbamos a llegar a la madurez. Ése es el estado emocional básico que guía a los personajes de El vecino desde el principio, y que probablemente no se resolverá en ningún momento de la historia”
Y ya en 2019 explica Santiago García reflexionado sobre esto:
Éspoiler: no se resuelve. Puedo aseverarlo con la perspectiva que te da el haber cumplido ya los 50 y seguir igual de desconcertado. Quizás por eso seguimos siendo capaces de escribir a estos personajes en 2019.
Pues eso...
El vecino. Origen. Editorial Astiberri
Guion: Santiago García
Dibujo: Pepo Pérez
Color: Pepo Pérez, Isabel Cortés
Formato: Cartoné, 248 páginas
Precio: 30€