sábado, 28 de septiembre de 2019

Crítica teatro: Cinco horas con Mario de Miguel Delibes con Lola Herrera / Teatre Goya Barcelona


Miguel Delibes escribió la novela Cinco horas con Mario en 1966 y es uno grandes clásicos de la literatura en nuestro país. No fue hasta 1979 que se estrenó la primer versión teatral del texto y ya con Lola Herrera como protagonista. Un papel que ha vuelto a interpretar en innumerables ocasiones a lo largo del tiempo. Un personaje que la veterana actriz domina a la perfección y que ahora puedes descubrir del 18 de septiembre al 20 de octubre en el teatro Goya en Barcelona.

Nos encontramos en la España de los sesenta más clasicista y tradicionalista. Estamos en casa de Carmen Sotillo, en el velatorio de su marido Mario. Este ha muerto de forma repentina. El trasiego de las visitas de familiares y amigos ha quedado atrás. Solo resta su mujer, Carmen, y el difunto esposo. Cinco horas en las que la mujer repasará aspectos de su vida en común. Cinco horas intensas en las que la mujer se abrirá como nunca lo había hecho antes en un imparable monologo-dialogo interior.

Lola Herrera nos da una lección del teatro más clásico, pausado, aquel que contando una vida sin grandilocuencias, puede atraparte igualmente, solo que hay que prestar algo más atención. Los capítulos de su vida que va desgranando conforman una realidad de muchas mujeres de esa época. Nos muestran una mujer abnegada con tristezas, alegrías, miserias, contradicciones, anhelos y reproches, que cada persona recibirá de una forma diferente. El amor y el sexo también estarán presentes. Descubriremos su fortaleza interior, también quebrantable, sus pensamientos mas íntimos y secretos, en esa catarsis que representan las horas a solas con el difunto.

Su marido fue un profesor liberal, que no busco el enriquecerse economicamente pero sí en sabiduría. No se entregó a los supuestos placeres del consumismo, pero fue un poco a la suya. Carmen lleva al púbico a sufrir por lo que ha vivido, al desear más ese aparentar, ese consumismo en forma de ansiado Seat 600 que todo el mundo tiene, en vez de tanto libro y cultura, o ese pensamiento de que con disciplina cuartelera un país va adelante.

La obra la resume perfectamente Lola Herrera con estas palabras: “Empecé a vislumbrar la “trastienda” de esta mujer, lo que ocultaba detrás de sus palabras. Carmen estaba llena de carencias, vacíos, frustraciones, soledad, sueños no realizados...” Y es que Cinco horas con Mario y con el viaje emocional de su protagonista, descubriremos los pesares, fruto de su tiempo o de su matrimonio.

Este contraste agridulce entre la realidad imperante de la época y el mundo actual provocará las risas del espectador, incluso en las partes más dramáticas. Tal vez en otros tiempos más cercanos  a la obra esto se producía menos. Estas risas espontaneas son también una respuesta liberadora a nuestro propio análisis del sufrimiento, respuesta y forma de actuar de la protagonista. Sin embargo hay momentos en las que las risas del publico enmudecen lo que la protagonista está explicando, porque ella está metida absolutamente en su papel y no hace pausas, ni concesiones, como si estuviera verdaderamente sola con su esposo. ¡Magistral! pero con ese hándicap. La obra también puede verse en la vertiente feminista de la lucha de la mujer contra ese modelo impuesto décadas atrás y ya caduco.

El decorado es sobrio como la obra. Y así ha de ser porque aquí la que brilla es la actriz. Aunque tal vez esta obra llegaría más, en un teatro mas pequeño, más intimista, pero estamos hablando de una actriz de primera que llena hasta la última fila, y claro, no puede ser.

Cinco horas con Mario es teatro pausado y clásico, y aunque para muchos pueda parecer de entrada una obra densa y aburrida, no lo es, y te arrancará risas cuando menos te lo esperas. Eso si, hay que estar muy atento a las diversas historias que va narrando la protagonista para no perderse. Una Lola Herrera que claramente llena todo el escenario con este aparentemente frágil personaje.


CINCO HORAS CON MARIO
Teatro Goya
Del 18 de septiembre al 20 de octubre
Horarios: de martes a sábado: 20:00 h / Domingos:  18:30
Precio: 28 €
Autor: Miguel Delibes
Adaptación: Miguel Delibes, Josefina Molina y José Sámano
Dirección: Josefina Molina
Voz locutor: Julio López 
Actriz:  Lola Herrera
Escenografía: Rafael Palmero
Iluminación: Manuel Maldonado
Música: Luis Eduardo Aute
Espacio sonoro: Mariano Díaz
Productores: José Sámano
Directora de producción: Nur Al Levi
Técnico de iluminación / sonido: Manuel Maldonado
Regidor y gerente: Cristina Berhó
Coordinadora de producción: Cristina Lobeto
Administració: Eli Zapata
Peluquería: Gema Moreno 
Jefe técnico del teatro: Roger Muñoz
Jefe técnico del teatro: Roger Muñoz
Construcción escenografía y atrezzo: Mateos / Sabre
Tapicería: Emilio Ardura
Mantenimiento utilería: Javier Pastrana

jueves, 26 de septiembre de 2019

Exposición obra original / Monos de Francisco Ibáñez con Antoni Guiral / Museu del Còmic de Sant Cugat / Paco Baena / José Luis Villanueva

El pasado 17 de septiembre de 2019 se inauguró la exposición MONOS DE IBÁÑEZ en el Museu del cómic de Sant Cugat, comisionada por el divulgador y experto en cómics Antoni Guiral, allí presente, y realizada por lo que pudimos ver con mucho mimo y gusto. Contó también con la presencia de Ibáñez que se mostró amable y divertido durante la velada. La exposición estará abierta hasta el 12 de enero de 2020.
 

Antoni Guiral: Esta exposición muestra bien en tebeos impresos o en originales, una parte de la trayectoria de Francisco Ibáñez. La exposición está dividida en tres partes. Una primera en cinco paneles en los que se intenta explicar la trayectoria de Ibáñez, lo cual no es fácil en solo cinco paneles aunque estén ilustrados. La otra parte importante son las vitrinas en las que se muestra un recorrido cronológico en forma de publicaciones, desde la primera historieta que publicá en la revista Nicolás n.º 95 (1952) hasta el año 2019. Dichos tebeos están abiertos por la pagina donde están sus trabajos, indicando la época y el año en que fueron publicados. Una serie de publicaciones, muchas de ellas de la Editorial Marco, donde el autor publicó muchos años. y otras como Paseo Infantil que era de la Editorial Ediciones Generales. Son interesantes porque no es habitual ver ciertos tebeos donde dibujó Ibáñez. 


 Veréis también que en algunas vitrinas hay merchandising de los personajes de Ibáñez. Hay también ediciones extranjeras: alemanas sobre todo pero también brasileñas, francesas, griegas, italianas de Mortadelo y Filemón. O sea, en esta exposición hay un poquito de todo.


Luego está la tercera parte que son los originales, la sección más interesante e importantes de la exposición. El cómic es básicamente algo impreso que se multiplica por 100, por 10.000, cuanto más mejor, y se ve siempre impreso en papel, pero los originales son otro mundo, porque el original es siempre más grande que el tamaño al que se reproduce y puedes ver el trazo del autor. Piezas únicas que no pueden verse habitualmente y que están expuestas de manera cronológica, y en las diferentes editoriales. Hay originales muy poco vistos que tienen interés al menos histórico. Dos series como Doña Pura y Doña Pera, vecinas de la escalera . Y el doctor Esparadrapo y su ayudante Gazapo de las que solo dibujó 4 y 5 páginas respectivamente. Pero ahí están los textos y dibujos que él hizo para llevar a Bruguera en los sesenta y que se los aprobaran. También hay portadas originales. Es una exposición modesta pero bastante ambiciosa.


Francisco Ibáñez: Si soy un cenizo, ya que echando la vista atrás todas las editoriales y revistas por las que he pasado, las he ido cerrando. Marco, Nicolás, La Risa, Plaza, el gigante Editorial que fue Bruguera, Ediciones B… Confió en que la última en la que estoy aguante… Yo ya tengo 83 años, lo menos que aguante hasta mi final, luego con ellos ya veremos lo que pasa. Han ido cayendo todas.

Francisco Ibáñez: Hoy día mucha gente no cree que yo continué trabajando. ¿Hoy en día no se hacen las cosas por ordenador? El día que encuentre un establecimiento donde vendan ordenadores capaces de crear y desarrollar una historieta, yo estoy en la cola. Hoy la historieta sigue siendo coger un papel en blanco, coger el lápiz, ponerte el papel delante y empezar a desarrollar una idea, anotarlas. Hacer una historieta es como el músico que primero llena el pentagrama con sus notas, luego coge el instrumento y se pone a interpretar… Yo lleno mi bloc, que es el pentagrama, con todas las notas de lo que voy a hacer, y luego cojo el instrumento que es el lápiz, y me pongo a dibujar. Esto siempre se hace igual. Lo difícil de todo esto es que estamos en un país que de amantes del arte del dibujo hay infinidad y muy buenos. En cambio si nos vamos a la parte del guion, no se porqué pero hay menos. En cualquier reunión puede haber un tío que cuenta una historia con una gracia tremenda y hace reír. Y me dice ¿ah tu haces historietas?, pues ya te haré un guión, pero luego al ponerse delante del papel desaparece. Por eso digo que el guión cuesta horrores, cuando la mayoría de gente coge la revistita solo ve el dibujo, este personaje y tal hacen gracia, pero lo que hace verdadera gracia es el guión. Y es difícil en el papel en blanco: ¿qué pongo aquí?, ¿qué pongo?. Hasta ahora he ido poniendo. Estoy de camino hacia en el segundo cincuentenario de producción de Mortadelo. Espero hacer algo bonito en el tercer cincuentenario. Ya veremos que pasará… (risas)


A veces miro mis trabajos antiguos en exposiciones como esta y pienso Estos dibujos tan chiquitines los hice yo, lo hacia mejor que ahora, que bueno que era.

Francisco Ibáñez: Hubo un tiempo hablando de las ediciones fuera del País. Yo le proponía al director del gigante editorial, ya que compráis cosas de fuera y las publicáis aquí, porque no lo hacemos al revés y ganamos algunas perrillas y me decía: No señor Ibáñez, tenga usted en cuenta que el humor fuera de nuestro país es muy diferente al nuestro, allí no lo aceptarían… Lo intentaron con Mortadelo y al cabo de cuatro días la tirada de Mortadelo en Alemania doblaban las tiradas de España. La coña siempre es la coña, aquí o en Alemania. Aunque sean países y formas de vivir distintas el éxito fue el mismo. Ahí radica la grandeza, la gloria, lo tremendo que es el autor, que es una maravilla (esto dicho en tono jocoso). Y ya sin entrar en la historieta con solo ver el nombre de los personajes en algunos países ya era para reírse… Los griegos con esos nombres largos, los franceses lo mantuvieron igual, los italianos los afeminaron un poco, Mortadela y Filemona creo recordar…


Francisco Ibáñez: Yo siento una añoranza tremenda de estas publicaciones antiguas porque en aquel entonces tenía que apartarme el mechón de pelo cuando dibujaba . Y todo esto se acabo, aquellos tiempos. Esto duró cuatro días. Y mira que hay un tiempo que cuidé mi cabellera y la puñetera me abandono igualmente.
Francisco Ibáñez: Rompetechos me gustaba porque es calvo y miope como yo, y encima tiene la ventaja de que es un solo persomaje. Los demás personajes iban por parejas o por tríos como Chicha, Tato y Clodoveo. Este es uno solo y chiquitajo….


-¿La iniciativa de este museo como la ves?
Francisco Ibáñez: Magnifica. En un momento en el que a veces parece que el cómic de humor se tambalea. Quedamos pocos, Jan con Superlópez y algunas reediciones que se hacen de Zipi y Zape, Carpanta, Anacleto… Con un poco de suerte actualmente algún hijo de padres que los leían los podrán leer también.


Antoni Guiral: Agradezco a este museo que es una iniciativa a que hay que apoyar a todos los niveles, y sobre todo que ayuden las instituciones publicas. La historieta es nuestro patrimonio y eso se llama también cultura, como otras cosas de las que si hay museos y ayudas. Esto también cuenta y recordemos que además es un medio el de la historieta que ha llegado siempre a millones de personas. Otros medios igual tienen mas prestigio, pero no han alcanzado esas cifras. No son medios tan populares y quizá este sea uno de los problemas que tenemos, que es un medio popular y eso hay gente a la que no le gusta. Sin embargo la historieta es un medio popular pero también de calidad y que puede exponerse perfectamente en los museos y que, sobre todo, debe guardarse, preservarse, mostrarse y divulgarse. Esta clarisismo.   Yo, Paco, quiero darte las gracias por todo, por 83 años y porque sean muchos mas. Porque creo que has hecho reír, sonreír y carcajearse a millones de españoles y a muchas generaciones…


martes, 24 de septiembre de 2019

Crítica teatro: La Tienda de los Horrores de Àngel Llacer y Manu Guix / Teatre Coliseum Barcelona


La historia de esta peculiar tienda se remonta a 1960 cuando el famoso director de cine de serie B Roger Corman, junto al guionista Charles B. Griffith, realizaron la película The Little Shop of Horrors. La adaptación teatral en forma de musical llegó mucho más tarde en el año 1982 con música de Alan Menken y letras de Howard Ashman. Cuatro años después el director Frank Oz llevó al cine esta obra de teatro y es esa película Little Shop of Horrors (La Tienda del os Horrores) la que la mayoría de publico recuerda.

Ahora La tienda de los Horrores vuelve por la puerta grande bajo la dirección de Àngel Llàcer y la dirección musical de Manu Guix. Una nueva vida para este clásico musical con el que curiosamente ya habían estado ambos relacionados hace veinte años cuando se representó en Madrid.


Seymour (Marc Pociello) es un apocado dependiente de una desastrosa floristería. Su vida es gris y además esta enamorado de su compañera de trabajo, la dulce Audrey (Diana Roig). Esta es maltratada por su novio dentista (José Corbacho). El dueño de la tienda El Sr Mushnik (Ferran Rañé) solo piensa en hacer algo de dinero. Las vidas de todos cambiaran con la llegada de una extraña planta…

La Tienda de los Horrores es una comedia musical con un montaje impecable. El decorado con varios niveles es espectacular. Solo viéndolo ya nos sumergiremos en un típico barrio de los Los Ángeles  sucio y venido a menos y en el que está ubicada la tienda. Un decorado que da mucho juego, sorpresas y que permite que las The Sey Sisters, el trío de cantantes, pueda aparecer en escena desde donde menos te lo esperas integrándose en la historia. Ronette, Chiffon y Crystal forman este grupo que ya tiene amplia experiencia en el Funk y el Soul.


Esta no es una obra fácil, porque la planta, Audrey II, ha de ser más o menos creíble y espectacular, tener movimiento y un apetito atroz… Todo esto se logra con un buen apartado técnico y el buen hacer del maquinista e ingenieros de Audrey II.

Marc Pociello está acertado en el papel de apocado Seymour y Diana Roig clava el tono de voz de Audrey. Los dos están fantásticos y Roig canta con una voz muy bonita y melodiosa. El veterano Ferran Rañé demuestra que es un actor todoterreno. No puedo alabar en esta critica la seguramente histriónica y apoteósica interpretación de José Corbacho como el alocado dentista, porque en la sesión que asistí su papel recayó en el cover Bernat Cot, que también dinamitó a todo el público con su personaje, siendo ciertamente uno de los momentos más divertidos, de puro espectáculo y de humor de la obra.

Como hemos mencionado mover a la planta debe de ser complicado y aunque esta abre y cierra la boca cuando habla y canta, es muy difícil que se acople con lo que canta, pero no importa, gracias al espectacular tour de force que realiza Manu Guix dándole su voz, sin olvidar que también toca el piano y es el director de la orquesta en directo. Gracias a la idiosincrasia del decorado podemos ver a Manu en acción cantando y es un gozo ver su pasión. Da autentica vida con solo su voz a Audry II.


La Tienda de los Horrores es una historia de amor y también de hasta donde llegarías por alcanzar tus sueños. Un buen espectáculo musical salpicado con buenas piezas musicales de todos los géneros y letras convertidas al castellano y muy logradas. Tal vez le falte algo más de humor, pues casi todo recae en el papel de Corbacho. Esta el hándicap de que si has visto la película tal vez no te sorprenda tanto, pero es un buen montaje que cuenta, además, con la valentía de adaptar el final original, más frío, que no se incluyó en el film del año 1986. Por todo esto, sin duda es el gran musical de la temporada.


Horarios: Miercoles y jueves: 20.30 / Viernes: 18:00 y 21:00 / Sabados: 18.30 y 21:30 / Domigos: 17:30
Precio:  A partir de 16 €
Duración: 105 minutos
Idioma: Castellano
Dirección: Ángel Llàcer
Reparto: Marc Pociello, Diana Roig, Ferran Rañé, José Corbacho, Víctor Gómez, The Sey Sisters, Sylvia Parejo, Bernat Cot, Natán Segado, Raquel Jezequel
Título original: Little Shop of Horrors
Autor: Roger Corman
Composición musical: Alan Menken
Traducción: Marc Artigau
Adaptación: Marc Artigau
Libreto: Howard Ashman ,Charles B. Griffith
Ayudante de dirección: Daniel J. Meyer
Dirección musical: Manu Guix
Dirección tècnica: Titín Custey
Músicos: Manu Guix, The Veterans
Voces: Manu Guix
Escenografía: Enric Planas, Carles Piera
Iluminación: Albert Faura
Sonido: Roc Mateu
Caracterización: Helena Fenoy, Marta Ferrer
Vestuario: Míriam Compte
Coreografía: Myriam Benedited
Música original: Alan Menken, Howard Ashman

domingo, 22 de septiembre de 2019

Crítica teatro: Kràmpack / Aquitània teatre / Jordi Sànchez / Pep Anton Gómez


Kràmpack se estrenó hace ya la friolera de 25 años. La obra fue escrita por Jordi Sànchez antes de ser el popular López en la serie Plats Bruts y aun muy lejos de su papel de Antonio Recio en la serie La que se avecina. Kràmpack fue un gran éxito y hasta se convirtió en película dirigida por Cesc Gay que la adaptó libremente. La obra de teatro original en su estreno estuvo protagonizada por el mismo Jordi Sànchez y Joel Joan, el que sería su pareja cómica en la genial serie de TV Plats Bruts. Ahora lejos de aquel 1994, vuelve Kràmpack esta vez dirigida por Pep Antón Gómez y claro esta con nuevos intérpretes. Este nuevo Kràmpack sigue teniendo intacto su músculo, y es plenamente moderno y actual, por que, a fin de cuentas, el mundo de las relaciones amorosas, sus conflictos y  sin sabores, siempre están presentes e interesan en cualquier época.

Pau, Jose Luis y Xavi son tres amigos que han decidido alquilar un piso para vivir juntos. Como sobra una habitación deciden alquilársela a una antigua conocida Berta. Pau y Berta habían sido novios y puede que sigan sintiendo algo, y ella también atrae a sus amigos. La tensión y el juego van a empezar… Por si esto fuera poco el piso incluye otra inquilina peculiar.

Kràmpack gira entorno a la amistad y el amor. Las relaciones desde varios ángulos y estadios: la ingenuidad, la frustración, el deseo, el atrevimiento, las dudas, el juego, el desengaño, el amor no correspondido. Y todo ello lo hace con mucho humor y con un ritmo endiablado, no excepto de carga dramática. Habla de las dudas sexuales, de como un juego en principio desprovisto de sexo y amor, solo para pasarlo bien, va a ser algo más complicado de gestionar emocionalmente. Kràmpack abre a los protagonistas puertas que nunca habían abierto, e interpretan con mucha credibilidad esas dudas y anhelos cuando las cosas se ponen tensas.  Y, por encima de todo, la duda más potente ¿me quiere? ¿la quiero? También incluso quedará espacio para tocar de pasada la soledad y la muerte.


Los decorados de la obra son sencillos pero eficaces. Un primer acto que representa un piso de persona mayor se consigue con un solo mueble y una decoración rancia. Se han cuidado pequeños detalles como que aparezca la vetusta revista Triunfo. En los otros actos se alternarán una mesa de comedor, un sofá y una nevera. Es junto a esta última donde se crea uno de los momentos más intimistas de la función, visualmente bien realizado y casi onírico.

Los personajes son exagerados, pues estamos en una comedia de situaciones, pero son creíbles. Álex Ferré (Pau) interpreta muy bien el papel que en el original representó Jordi Sànchez. Un joven algo tímido, nervioso, inseguro, lleno de neuras, al que le cuesta dar un paso adelante. Y lo hace alejándose de los tics reconocibles de Jordi SànchezMikel Iglesias (José Luis) esta acertado como el amigo castellano, ilusionado con Berta y el que a la postre será el más centrado. El juego de diálogos en castellano / catalán siempre hace gracia. Lídia Casanova es la alegre Berta por la que los tres beberán. Un papel con varios conseguidos registros dependiendo de con que amigo se relacione.  Y por último Jaume Casals espléndido en el papel de Xavi, y no queda ninguna duda que es el papel que interpretaba Joel Joan en la obra original y que continuó en la serie Plats Bruts.  Una imitación la de Jaume Casals, muy lograda, que, en un principio puede producir rechazo aunque es una buena copia de la forma de actuar más histriónica de Joel Joan.  En definitiva es lo que provoca buenas dosis de risa en Kràmpack.  La aceleración, pasotismo, desvergüenza y el tenérselo creído del personaje divertían en Plats Bruts y aquí también y más con ese contraste entre Pau y Xavi, con esa relación de amor odio y de sentimientos insospechados.

La convivencia no es siempre fácil y Kràmpack destapará una montaña rusa de emociones desde el prisma del humor y comedia vigorosa pero con sus puntos amargos y de reflexión. Las relaciones amorosas no son fáciles, y si ya haces un Kràmpack… Descúbrelo en el teatro Aquitània. Una obra que os animará tanto si la veis por primera vez como si ya sois veteranos.


KRÀMPACK
Aquitània Teatre
Del 12 de Septiembre de 2019 al 27 de octubre de 2019
Horarios: Jueves y viernes: 20:30  / Sabados: 18:30 y 20:30 / Domingos: 20:30
Precios: A partir de 10€
Duración: 80 minutos
Dirección: Pep Anton Gómez
Reparto: Àlex Ferré, Mikel Iglesias, Jaume Casals, Lídia Casanova
Autor: Jordi Sànchez

El programa de mano se presenta en varios diseños originales

lunes, 16 de septiembre de 2019

Crítica Teatre: Kràmpack / Aquitània Teatre

Quan fotre un Kràmpack és més que un joc...


Kràmpack, la primera comèdia de Jordi Sànchez, que es pot tornar a veure des del 12 de setembre de 2019 al Teatre Aquitània, s’estrena avui, 16 de setembre, després de més de vint anys de l’èxit de l’espectacle original – que fins i tot va inspirar una pel·lícula dirigida per Cesc Gay l’any 2000.

L’obra, dirigida per Pep Antón Gómez, és una comèdia sobre la relació d’amistat entre un grup d’amics que ronden la vintena d’anys i que decideixen anar a viure junts. La convivència farà que aflorin fortes tensions sexuals i els protagonistes s’acabin despullant emocionalment.

El ritme dinàmic i el to desvergonyit es mostren ja des de la primera escena en què Pau (Àlex Ferrer) junt amb José Luis (Mikel Iglesias) i Xavi (Jaume Casals) organitzen el funeral de la padrina –així és com l’anomena Pau-, l’antiga inquilina que troben morta al pis. Tot i així, la mort de la padrina no serà qui desencadeni el conflicte principal, sinó Berta (Lídia Casanova), l’ex d’en Pau, que ocupa la quarta habitació que queda per llogar, i a en José Luis i a en Xavi els hi agrada.

A partir d’aquest primer plantejament, característic d’una comèdia de situacions, l’espectador s’endinsa en la trama narrativa captivat per l’autenticitat dels actors. En aquest punt, però, cal esmentar les  reminiscències de Plats Bruts, especialment, pel fet que Àlex Ferrer i Jaume Casals recorden a López (Jordi Sànchez) i a David (Joel Joan), respectivament –en concret, Jaume Casals l’imita a la perfecció. Potser el director ha volgut que aquests imitessin els actors que interpretaven papers similars en l’espectacle original, però, tot i ser una imitació molt ben aconseguida, aquesta limita el joc interpretatiu més personal -en concret, el de Jaume Casals

L’escena en què les actituds i els comportaments ja no són merament superflus té lloc a la cuina. La mateixa escenografia i el vestuari mostren que s’inicia una escena més intimista: un escenari enfosquit que contrasta amb la llum de l’interior del frigorífic, que el deixen obert, i al costat del qual Pau i Xavi apareixen asseguts vestits amb samarreta i calçotets. Mig despullats acaben fent un Kràmpack, que és més que un joc entre amics. A partir d’aquest moment, es desenvolupen la resta d’escenes amb una càrrega molt més dramàtica on es deixa més de banda la superficialitat còmica. 

Kràmpack és una obra recomanable: enganxa in crescendo des de les primeres escenes. Per passar una bona estona i riure.

Crítica escrita per Teresa M. 


KRÀMPACK
Horaris: Dijous i divendres 20:30h, Dissabtes 18:30h i 20:30h, Diumenges 18:30h
Idioma: Català
Durada: 80 minuts
A partir de 10 €
Producció: White Moose
Autor: Jordi Sánchez
Direcció: Pep Anton Gómez
Actors: Àlex Ferré, Mikel Iglesias, Jaume Casals, Lídia Casanova

domingo, 15 de septiembre de 2019

Crítica teatro: La Llamada de Javier Ambrossi y Javier Calvo / Nerea Rodríguez, Angry Fernández, Ruth Lorenzo, Roko, Mar Abascal / teatro Poliorama Barcelona


La obra teatral La Llamada se gestó hace ya más de seis años cuando sus directores Javier Calvo y Javier Ambrossi la estrenaron como pieza de pequeño formato en el Hall del teatro Lara de Madrid. El boca a boca, la prensa y blogs empezaron a recomendar esta obra. Así La Llamada pasó al escenario del teatro y creció aun con apenas medios y presupuesto, pero llenando el aforo cada noche. El resto es historia: después de tantos años sigue activa, empezó una gira en el año 2014 por España, ha conseguido multitud de premios y hasta se transformó en película en 2017 dirigida por sus mismos creadores. Ahora esta joya se ha estrenado en el teatro Poliorama de Barcelona y se representará durante tres únicas semanas y solo se puede dar un consejo: ¡No os la perdáis!


Dos adolescentes Susana Romero y María Casado están recluidas en el Campamento cristiano La Brújula. Las dos amigas solo piensan en escaparse e irse de fiesta. El campamento está bajo el férreo control de la hermana Bernarda ayudada por la monja Milagros, más joven e inocente. La vida y creencias de María se trastocarán cuando se le aparezca el mismísimo Dios. En verdad las consecuencias serán imprevisibles para todas.

La llamada es una divertidísima obra de teatro repleta de buenos diálogos con humor en que la sonrisa es constante. María (Nerea Rodríguez) y Susana (Angy Fernández) clavan el papel de jóvenes alocadas. Sus diálogos son espontáneos. Pero es que no se quedan atrás Roko como la monja Milagros con esa mezcla de candidez, ese tono de voz y esa forma peculiar de ser. El cuarteto se completa con Mar Abascal como la monja jefa, con ese aire de monja superiora enrollada que intenta ser moderna y severa a la vez. Las cuatro actrices están geniales en sus papeles y hacen de La llamada una comedia de diálogos muy ágiles con buenas salidas que fluyen con naturalidad y mucho humor, pero es que ademas las actrices se relevan también brillantes cuando tienen que cantar. Y claro está, por encima de todas esta Dios que es omnipotente y con ese chorro de voz de Ruth Lorenzo. Porque la obra también es un buen musical. Hay que decir que las actrices cambian dependiendo de la función, aquí hemos hecho hincapié en las que actuaron en el estreno.


No nos engañemos, La llamada sigue siendo una comedia musical de pequeño formato, pero ya quisieran para sí otros musicales aparentemente más espectaculares, trasmitir toda esa alegría, ritmo y potencia que logra el espectáculo. Los números se apoyan con golpes de efecto a base de humo y buen juego de luces. El escenario no cambia en toda la obra. Unas literas en una esquina y cuatro paredes que simulan el campamento. En el centro unas escaleras con una gran cruz y a ambos lados de esta los cuatro músicos que componen la banda de rock que toca en directo. La obra no necesita nada más gracias al gran talento de las actrices y de las potentes apariciones de Dios.


La llamada dura cerca de dos horas y no aburre ni muestra altibajos, salvo las paradas que provoca el público debido a las risas. Casi cada espaciado número musical impacta por las voces, y algunos te podrán la piel de gallina. Un camino de humor, canciones y emoción que conducen a la explosión final de alegría, color, cambio, superación y buen rollo, que logran que todo el público aplauda levantándose de sus butacas.

Para los que han visto la película decir que esta tiene un poso más nostálgico y algo melancólico, la obra de teatro es en sí más espectáculo explosivo, aunque la parte cómica es similar.

La Llamada es un musical de calidad. Su mensaje no es moralizante y trasmite esa alegría de vivir, de no preocuparse tanto por los problemas, de acabar siendo una versión mejorada de ti mismo, de que por unos instantes todo cuadre, ya lo rezan su protagonistas en ese lema vital “Lo hacemos y ya veremos”. Siente la llamada... te garantizamos que te lo pasarás bien, saldrás contento y como diría Susana “lo fliparas”.


LA LLAMADA / Teatro Poliorama
Del 12 de Setembre de 2019 al 29 de Setembre de 2019 
Miercoles a viernes:  21:00 h  / Sabados: 18:30 y 21:30  / Domingos:  18:30. Consultar horarios
Precio: A partir de 15,70€
Duracion: 115 minutos
Idioma: Castellano
Dirección: Javier Ambrossi,Javier Calvo
Autor: Javier Ambrossi, Javier Calvo
Reparto: Nerea Rodríguez: 12, 13 i del 18 al 29. Andrea Guasch: 14 i 15. Mar Abascal: del 12 al 29. Angy Fernández: del 12 al 15. Lucia Gil: del 18 al 29. Roko: del 12 al 26. Erika Bleda: del 27 al 29. Ruth Lorenzo: 12, 13, 26 i 27. Raoul: del 20 al 22. Richard Collins Moore: 14, 15, 18, 19, 25, 28 i 29
Escenografía: Ana Garay
Iluminación: Carlos Alzueta
Vestuario: Ana López Cobos
Música original: Alberto Jiménez
Producción ejecutiva: Mariano Piñeiro
Premios: Mejor musical  Premios Broadway World
Mejor actriz Premios Broadway World
Mejor dirección Premios Broadway World
Mejor actriz de reparto  Premios Broadway World
Mejor actrz de reparto Premios de Teatro Musical

miércoles, 4 de septiembre de 2019

Entrevista a Das Pastoras / Julio Martínez


Das Pastoras es un ilustrador y dibujante de cómics. Su obra se ha podido ver desde las míticas revistas ochenteras de ciencia ficción, fantasía y terror como Zona 84, Cimoc, Comix Internacional, Creepy, la costumbrista y de humor Mas Madera! que fue el ultimo intento real de Bruguera de modernización, la underground El Víbora, el semanal del humor El Jueves e incluso incursiones en Marvel, sin olvidar las portadas e ilustraciones en los libros de rol para Jocs Internacional. El estilo del autor es muy personal y reconocible. Espectacular tanto en dibujo como en color, luz y con mucho volumen. Su nombre es Julio Martínez Pérez, pero en su Galicia natal lo llamaban por el nombre de los de su casa “los de los Pastores” y lo utilizó como su nombre artístico.

ENTREVISTA A
DAS PASTORAS 





-¿A qué edad ya pensabas dedicarte al cómic?
A mi me gustaba el cómic y me gustaba dibujar. Pero objetivo de ser dibujante de cómics no tenía. Yo me vine aquí a Barcelona para hacer Bellas Artes.

 Foto extraída del blog Viñetas

-¿Qué cómics leías de joven?
Leía cómics pero no me interesaba quien los dibujaba, tan solo leía las historias. Pulgarcito, Tio Vivo, El Capitán Trueno y Jabato. Yo me iba directo a las páginas en Tio Vivo de Gir o Moebius, sin saber ni quien era ya me gustaba. Aunque uno de los dibujantes que más me pegó fue Víctor de la Fuente y también Hernández Palacios. Luego apareció la revista Trinca y descubrir el Arzak de Moebius me impactó. De hecho lo primero que hago para la revista Comix Internacional es muy Moebius. No copiaba sus personajes, de hecho me cuesta trabajo copiar, tengo incapacidad para hacerlo y un poco de vagancia de estar mirando. No cojo documentación, por eso he hecho tanta mierda (risas), por no levantarme, buscar y copiar un fondo, por ejemplo. Me da mucha pereza copiar, sí que lo estudio y luego lo dibujo ya sin mirar. No cojo un modelo, una referencia, lo hago con lo que he estudiado previamente y es un fallo en realidad, porque las cosas las sabes pero no muy bien.

Ilustraciones originales para interiores de un juego de rol Stormbringer.

-¿Fuiste autodidacta ?
Desgraciadamente sí. Porque se aprende muy lento, mal y coges muchos defectos.

-En 1981 te unes a un grupo de jóvenes autores que luego se harían imprescindibles como  Toni Garcés, Miguelanxo Prado, Mike Ratera, José María Beroy, Pedro Espinosa y Pasqual Ferry, entre otros, para crear el fanzine Zero que duró 10 números. Cómo era llevar ese fanzine con tanto autor.
Fue bien. Fue la manera de entrar en contacto con el cómic. Con la materia. Yo hasta ese momento no conocía a ningún dibujante. Cuando llegué a Barcelona en la pensión que estaba había dos dibujantes de Ciudad Real y nada más. Donde empece a tomar contacto con el mundillo fue con la gente de fanzine Zero, que tampoco estaban aun muy metidos en el cómic profesional. A raíz de esto conocimos a gente que estaba más introducida como Mediavilla y Gallardo.
La verdad es que entré en contacto con los dibujantes gracias a Toni Garcés. Yo trabajaba en un taller pequeño que hacía maquinas para biselar cristales de las gafas y Garcés hacia la publicidad de la empresa. Un día vino y uno de los jefes me dijo que le hiciera “un dibujito a este señor” Y ahí empezó todo...

 Primeros trabajos del autor para el mítico fanzine Zero en 1981

- ¿Conociste a Josep Toutain? ¿Cómo era personalmente?
Sí, conmigo muy bien, aunque no tuve mucho trato. La primera vez que le mostré mi trabajo yo llevaba una carpeta repleta de dibujos. De todo tipo, no había ni siquiera una linea así de cómic. Dibujos sueltos. En esa época estaba en el fanzine Zero y es allí donde hice mi primer cómic, pero en folios. Pegando aquí y allá. Claro, empezó a pasar dibujos y cuando ya llevaba 20, me dice “mira, no se en concreto lo que vamos hacer, pero no quiero perder el contacto contigo”. Después ya me miré más sus publicaciones y me adecué a lo que sabía le iba a gustar. El contacto con el cómic más profesional con papel, tinta y rotulación lo empecé con Toutain.



Durante su larga carrera ha creado series con guiones propios como Guerreros y Canal 44 pero también ha colaborado con diversos guionistas como Narciso Fradera, Xavier Roca, Felipe Borrallo o Enrique Sánchez Abulí.

-Estuviste en Bruguera, en su última etapa con una revista muy variada y diferente de las que publicaban. Mas Madera!, capitaneada por Alfons López y producida por Saco Roto. ¿Cómo fue esa experiencia?
Yo no iba a las reuniones. A mí me pedían algo y lo realizaba. Es la primera vez que hice los grises marcando negro. También hice alguna portada. Fue algo muy breve. Y ahora me entero que era una publicación de Bruguera (risas), yo en aquella época era un pasota muy pasota, de ahí que empece a hacer cómics en folios no sabiendo muy bien...

 En la revista Mas Madera de Bruguera 
colaboró en cada número y realizó varias portadas en 1986


- Ahora se está empezando a recordar la revista El Víbora. Hay interés en la historia de sus viñetas. Tu también colaboraste en la misma. Inició su andadura en 1979 y se mantuvo hasta el 2004. ¿Ahora sería una publicación inviable de primeras?
Yo estoy muy apartado de todo. El Víbora más que revista de denuncia eran pajas mentales y también la vidilla de la calle y de la gente que hacía la revista. Era la contracultura de aquí, creo que narraban más cosas de la vida y ya ves como acabaron algunos. Yo hice cosas para ellos pero era tangencial, conocí algunos de sus dibujantes y a Emilio Bermúdez, que llevaba la revista, que ya lo conocía de la librería Makoki.

 Diversas portadas para El Víbora con historieta interior

- Uno de tus trabajos más recordados con cariño por los lectores es tu larga etapa en la revista El Jueves, primero con Kafre con guiones de Enrique S. Abulí y luego en solitario con el humor de Das Pastoras. Historietas cínicas y negras. Que técnica usabas en esas historietas
Lo que he usado casi siempre es tinta china y acuarela. Ahora utilizo más acuarela de tubo, antes usaba lo que se llamaba anilinas que eran acuarelas liquidas. Tenían unos colores más vivos y más potentes. Pero la volatilidad con la luz se pierde más rápido.


 -¿Has pensado alguna vez volver al semanario El Jueves?
No, porque es que tampoco casaría con la línea que tienen ahora y no me gusta. En El Jueves hacían encuestas y según estas Kafre no funcionaba, pero bueno fueron unos cinco años. Al final todo aburre o ellos pensaron que había que hacer otras cosas. O también lo de curas y negros ya empezaba a ser políticamente incorrecto.

En el suplemento semanal de "El Mundo" se publicaron también sus viñetas de humor gráfico recopiladas luego en dos tomos  titulados "Ustedes Perdonen" (Sinsentido)

- Hay lectores que te recuerda, algunos con cariño y otros no tanto, pero al menos no dejabas indiferente y no son otros que el de los jugadores de rol. Pues entre 1991 y 2003 ilustrabas las cubiertas e interiores de los libros de rol de Jocs Internacional Lider. Incluso realizaste las ilustraciones para el juego de cartas Lord of the Rings. Portadas como el abismo de la garganta de serpiente no creo que ahora se pudiesen publicar. ¿Te daban total libertad? ¿Te llegaban las opiniones de los jugadores?
Me daban información sobre qué trataba el libro, pero no me concretaban mucho. Pero ya no recuerdo porque hacia algunas portadas que no tenían mucho que ver con el interior. Recuerdo una de un gorila y un tío saltando con un shuriken, y no se por qué dibuje esa portada. Tampoco me llegaba a mí si esas portadas gustaban. Pero es que yo también pasaba de todo, si el editor me seguía encargando portadas, al menos a él le gustaban. Fue una de las mejores épocas de ingresos económicos porque hacia las portadas de rol y aun estaba en El Jueves. Porque luego hay unos cuantos años que estas a dos velas. Esa época fue buena de trabajo, tranquilidad, y me gustaba por que era un trabajo variado y diferente entre Kafre y el Rol.
Pero Jocs Internacional hizo en los noventa malas jugadas cuando se lanzó con las cartas coleccionales que fueron un fracaso y empezó a haber más competencia. Los Juegos de cartas de El Señor de los Anillos tampoco fueron bien de ventas.

“El vigor del movimiento y la viveza del color de las ilustraciones de Julio Das Pastoras ha coincidido con la búsqueda de una nueva expresión estética de calidad en la que está trabajando Joc Internacional."  Texto en revista lider en 1991de Jocs Internacional

-¿Usabas la misma técnica que en los cómics de Kafre?
No, para las portadas utilizaba óleo. Y para Kafre era lla ínea tinta rotulador casi siempre, acuarela y también plumilla y pincel.

-Has trabajado para el mercado franco-belga dibujando dos sagas de fantasía: Las Heresiarcas (escrita por Carlos Portela) y Catsaka (con guiones de Alejandro Jodorowsky) en 2002, con las cuales el público de esos países han podido descubrir tu arte. Estos han sido cómics de lo más elaborados en la parte gráfica.
Sí, de Las Heresiarcas estaban previstos más números pero en cierta manera nos la cortaron. No se vendió mucho y fue una de las series que más a gusto he estado y disfrutado. Sobre todo el primer volumen, porque el segundo el dibujo era como el de un sello, no sé a santo de qué cambió la narrativa, y eran ocho o diez viñetitas por página. En el primer volumen las páginas respiran, compones mejor y, claro está, es menos trabajo (risas) si tienes que hacer menos viñetas y menos pequeñas con los personajes. El segundo volumen fue muy trabajoso porque había varios personajes que iban juntos todo el viaje y no se perdía ninguno (risas). También en la cancelación de Las Heresiarcas no se hasta que punto fue porque Jodorowsky quería que empezará con el cómic suyo Catsaka.



-Luego incursiones en Marvel en 2009 con algunas historias cortas de Lobezno y Thor. ¿No te convenció seguir en Marvel? ¿O solo fueron trabajos puntuales?
Para mí fue muy bueno. Era otro registro. La pena es no tener un ritmo mas rápido. Yo no tenáa mucho conocimiento del mundo Marvel, y empece a ver trabajos de autores antiguos y descubrí una manera más espectacular de narrar. Puedes llamar la atención con un gesto. Después ves el cómic europeo, no por la temática, pero lo ves más descriptivo. Estas dentro del ambiente y el lugar, pero si lo que ocurre en la historia no tiene nada, pues entonces eres un turista. Estás mirando ostia que bien esta esto, que documentado, pero si se come la historia, mal. Marvel es la acción y lo que ocurre y lo que les ocurre a los personajes. Aunque también es verdad que el europeo esta cambiando y han cogido algo del estilo americano y se ve en los cambios de ángulo, en los planos, en los gestos… Aunque nunca sabes la intención del que lo dibuja. Como François Schuiten, que es un dibujante que es arquitecto y que hace unos edificios que casi son los protagonistas, impresionantes pero ¿Recuerdas alguna historia? Aunque claro, todo tiene algo que te puede gustar si te gusta el cómic, el dibujo...


-En 2015 realizas portadas para X-O Manowar de Valiant y otras colecciones como Book of Death: Fall of Ninjak y Bloodshot Reborn. ¿Te dan libertad en las mismas?
Solo dibujo las portadas. Por ejemplo en Bloodshot Reborn me dicen lo que ocurre pero luego yo hago un poco lo que quiero. En una al personaje se le metían una serie de robotitllos dentro del cuerpo y empezaban a fastidiarlo. Y eso es lo que me pidieron. Yo me limité a dibujarle bultos en la cara que se aprecia que le están haciendo daño...


 -¿En la actualidad en que estas trabajando?
Las portadas caen de vez en cuando, pero ahora la mayor parte del trabajo son comissions. Tengo ideas para algunos cómics pero has de tener tiempo y estar cubierto y yo no lo estoy. De trabajo estable de momento nada.



OTROS TRABAJOS Y CURIOSIDADES:


 Caricatura realizada por Raf para la revista El Jueves

Entrevista realizada en julio de 2019