LA FAMILIA ULISES de Joaquín Buigas y Marino Benejam
El pasado Jueves 19 de septiembre de
2012 tuvo lugar la inauguración de la exposición LA FAMILIA ULISES
de Joaquín Buigas y Marino Benejam. Nos podremos reencontrar con Don
Ulises, Doña Sinforosa, la señora filomena, Lolín,
Policarpito,Merceditas y Treski el perro.
La exposición cuenta con 38
originales ordenados de forma cronológica: 36 de Marino Benejam (aunque en
uno interviene el dibujante Tínez), uno de Salvador Mestres y otro
de Blanco. El evento ha sido organizado por el divulgador de la
historieta Antoni Guiral y dos expertos en TBO y coleccionistas, como
no podría ser de otra forma, Francesc Regàs y Lluís Giralt.
Habla Antoni Guiral:
Desde el año pasado intentamos montar una serie
de pequeñas actividades que se llaman Caric Art.
Lo primero que debo hacer es agradecer a Francesc
Regàs y Lluís Giralt su colaboración y ayuda para que esta
exposición pueda estar aquí. Ellos han cedido los originales
expuestos. Esta exposición también es posible gracias al Consorci
de Bibliotecas y en concreto a la biblioteca Ignasi Iglesias-Can
Fabra.
Es un placer especial. Una sensación
muy agradable poder trabajar con originales de una serie como esta.
Poder estar aquí. Poder verlos tan de
cerca. Pensad que este es un país que tiene una memoria muy
corta. Podéis decir Cataluña o España, es igual, los dos tienen la
memoria muy corta y creo que la reivindicación de nuestro patrimonio
cultural tiene que ser un acto prácticamente de civismo. Ha de estar
siempre presente, tenemos que luchar para que esto sea una realidad.
Sea como sea. Creemos que nuestras actividades, y esta es una de
ellas, son un acto de reivindicación. En este caso un acto de
reivindicación de La Familia Ulises, posiblemente la más popular de
todo el tebeo español, teniendo en cuenta que nació en el año
1944, que en 1983 la actividad de TBO finalizó, pero que después se
reeditó en Ediciones B, y ahora Salvat está publicando la colección
recopilatoria. Por tanto es una serie que está viva en la memoria de
varias generaciones. No tanto de la gente más joven pero si
seguramente de la gente que tiene más de treinta años. Por tanto es
un patrimonio nuestro.
La Familia Ulises es una serie
brutal en muchos aspectos. Nos enseña muchas cosas de nuestra propia
historia. A su manera reflejaba muchas cosas de la época en las que
están inspiradas estas historietas. Es un placer poder revindicar a
un guionista como Joaquim Buigas que era el editor y propietario del
TBO. Fue guionista de la serie hasta que murió en el año 1963 y no
solo hizo estos guiones sino también otros, ya que era escritor.
Tras su muerte los guiones pasaron a manos de Carles Bech,
colaborador del TBO. También queremos reivindicar la figura del
dibujante Marino Benejam, uno de nuestros maestros indiscutibles de
la historieta. Con un grafismo particular, fantástico, que ha
enseñado a muchos otros dibujantes muchas cosas porque tenía una
técnica muy depurada. Lo podéis ver en los originales. Está muy
bien tener la exposición de la Familia Ulises con los originales de
Joaquim Buigas y Marino Benejam, pero ha habido dos dibujantes más
que durante un tiempo hicieron la Familia Ulises, como mínimo hasta
el año 1983. Uno de ello fue Salvador Mestres que la continuó
durante casi un año y el otro es Josep Maria Blanco, que está aquí
con nosotros y quiero agradecer personalmente su presencia, ya que
estuvo dibujando muchos años esta página sin firmarla. Desde 1970
por motivos de salud Benejam, tuvo que dejar de dibujarla. Blanco
tenia un estilo propio pero se adaptó al grafismo de Benejam.
También quiero agradecer la presencia de los dos nietos del señor
Benejam, Lluis y Josep, porque de algún modo su presencia honora
esta exposición.
Cedo la palabra a Francesc Regàs.
Intentare comunicarlos un poco lo
que siento desde mi perspectiva básicamente de coleccionista, pero
más que de coleccionista, como aficionado al mundo de la historieta.
Mi etapa de coleccionista comienza de niño. La gente que ha sentido
un cierto o gran amor por el tebeo, somos gente de la generación que
ahora solemos tener 50, 60 o 70 años. Que lo hemos vivido porque nos
los compraban y era una de las referencias fundamentales que teníamos
en el mundo de ocio semanal. En aquella época de los años cincuenta
tampoco había muchas cosas con las que disfrutar: la radio, el cine,
la televisión (aún estaba en la prehistoria, ya que prácticamente
nadie tenía) y el TBO y las otras revistas humorísticas como el
Pulgarcito, el DDT, el Tio Vivo, que eran lo que los más pequeños
esperábamos. Localizaba este mundo del libro nuestro. Mi familia
estaba suscrita al TBO, les llegaba a casa cada semana y yo sentía
una predilección por esta revista. Esto
me llevó a coleccionarlos. Era una persona muy ordenada, los
coleccionaba y guardaba, cosa que me traía bastantes dificultades
con mi madre porque evidentemente tenía cajas llenas de TBOs y
siempre me decía que lo que tenía que hacer era tirarlos. Pero
aquello para mí era un tesoro y evidentemente no tiraba ninguno. De
mayor continué teniendo esta afición.
El TBO era una revista que se empezó a publicar
en el año 1917. Yo lo empecé a coleccionar en los años cincuenta.
Me dediqué a ir comprando números atrasados por los mercadillos, en
el Mercado de Sant Antoni, etc... TBOs de la primera época y de los
que estaban sin numerar, que salieron después de la guerra que es
verdaderamente cuando eclosiona el arte de Benejam. En un momento
determinado mi amigo Lluís Giralt me introdujo en el mundo
absolutamente vicioso del original. Por primera vez me enseñó un
dibujo original y os puedo decir a todos que al sentir este amor tan
especial por el mundo del tebeo, cuando te encuentras delante de un
original sientes una cantidad de sensaciones difícilmente
explicables. Evidentemente un original es una obra única. Es el
dibujo que sirve para que después se imprima la historieta, pero
cuando piensas que ese dibujo ha estado sobre la mesa de dibujo donde
ha estado trabajando el autor, el dibujante y que allí de alguna
manera está impregnado su sudor, muchas horas de dibujo, le
confieren a este elemento una mística especial.
Por otro lado el tamaño del dibujo
original es más del doble que el de su publicación. En los dibujos
originales puedes apreciar cantidad de detalles que en la obra
publicada no aparecen. Aparte, en aquella época la calidad de
impresión tampoco proporcionaba suficiente fidelidad como para
garantizar que los matices, que tantas veces les daba su autor en el
dibujo original, pasaran al TBO publicado. Esto hace que el dibujo
original, al menos para mí, tenga tanto valor, aparte de cómo obra
única. Esto hace que cada uno de los originales aquí expuestos sean
casi como hijos míos, me los sé de memoria y se perfectamente el
"tarannà" que tienen y en qué lugar los guardo,
porque, evidentemente, lo que no tengo en casa son tantas paredes
como para poder colgarlos todos. Por esto me complace verlos colgados
aquí, no tan solo los míos, sino los de los otros compañeros
coleccionistas.
A raíz de esto tenia una deuda con un autor tan
absolutamente fundamental en la historia del dibujo humorístico como
es Marino Benejam, porque para mí es una flagrante injusticia que en
la ciudad donde trabajo y que era el centro neurálgico de la
publicación del TBO, no hayamos sido capaces de organizar una
exposición al respecto. Esta es una magnifico y dignísimo
preámbulo, merecería la pena, porque Marino Benejam no solo dibujó la Familia Ulises, sino que llegó un momento entre el 1942 y 1950 en
el que prácticamente el 80 % del TBO lo dibujaba él. Firmaba formas diferentes: Benejam, Rino, de Marino y Ferrer que era
su apellido.
Creo que le debíamos este homenaje
y pienso que esta es el la primera exposición que se dedica de forma
especifica a La Familia Ulises. La primera piedra de una serie
de exposiciones que se tendría que hacer para abarcar el legado de
este gran maestro de la historieta. Benejam es uno de los principales
ninotaires, y esto no ha de ser nunca un apelativo peyorativo,
que continuó la línea de los grandes ninotaires como Joan
Llaveria, etc. Él con su estilo es una de las piezas principales del
mundo de la historieta. Hoy con esta exposición se le rinde el
homenaje que se merece.
Tal vez, desde mi punto de vista de
aficionado, este tema merecería que nos comenzaremos a plantear, las
administraciones y autoridades también, que todo esto que veis aquí
y que forma parte de nuestra historia, elementos que fueron dibujados
y publicados en los años cuarenta, figurasen ya, de una vez, iba a
decir de una puñetera vez, en lo que tendría que ser un museo
dedicado a la ilustración, algo que no tenemos en este país.
Tenemos grandes museos, todos muy dignos, pero no hay ningún museo
dedicado íntegramente a la ilustración que podría acoger obras de
grandes maestros como Benejam o de otras personas de tanto renombre o
menos.
Pero valdría la pena que estas
obras que están aquí colgadas y que forman parte de este contexto
cultural, que además está absolutamente imbricado en la pequeña
historia nuestra de cada día, tuvieran su museo. Para mí son
autenticas obras de arte equiparables, muchas veces, a piezas con tal
vez un predicamento muy superior.
Lluís Giralt no pudo acudir
a la inauguración pero recupero en su honor unas palabras que
escribió para El Boletín nº 31 de febrero de 1995:
Ser grafópata me ha llevado a la
especialización de unos dibujantes selectos: los de TBO porque son
los más decorativos. (...) El elevar la historieta a arte de museo,
he cumplido mi promesa hecha pocas semanas antes del fallecimiento de
mi querido y recordado amigo Josep Coll i Coll. Uno de los grandes
artistas catalanes del siglo XX. Así catalogó a Coll el prestigioso
periodista Jaume Vidal, en su reportaje publicado en EL País el 20
de octubre de 1994.
Me culpo de ser un grafópata grave.
Me culpo de haber contagiado a muchas personas (por suerte para ellas
ya empiezan a sentir los primeros síntomas). Me culpo de ser
insistente tozudo, empeñado en que sean reconocidos como lo que
ellos eran sin saberlo: verdaderos artistas.
Grafopatía: Obsesión de la
posesión de dibujos originales publicados antes de 1960. Esta
enfermedad no es grave para la economía familiar hasta su desarrollo
en 1978. Incurable ya desde 1987.
Grafópata: El que sufre grafopatía.
Persona obsesionada con poseer cientos de dibujos origionales. Piezas
únicas por ser las que realizaron los dibujantes antes de 1960. Son
piezas de grafópatas las dibujadas sobre papel blanco y a tinta
negra. También aceptan las coloreadas a acuarela o gouache. No
quiere las dibujadas con rotulador porque sabe que desaparecerán en
menos de 20 años. El grafópata es persona hogareña. Prefiere
admirar su colección y lo antepone al sexo.
Página de Benejam
Habla josep Mª Blanco Ibarz
dibujante del TBO (firmaba Blanco e Ibarz) que también estaba
presente en la inauguración al ser preguntado por Antoni Guiral:
¿Por qué no firmabas las
paginas que realizaste de La Familia Ulises?
A Benejam le tenía un gran afecto
como profesional y como persona. Consideré que firmar una cosa que
no era mía no lo tenía que hacer.
¿O sea que lo hizo por respecto?
Lo hice porque a la editorial le
convenía seguir con la Familia Ulises. Alguien la tenía
que hacer y me tocó a mí. Les dije que sí pero de firmarlo nada,
porque era un trabajador de la idea de él y no quise firmarlo. La
editorial me lo dijo, pero yo solo hacia las historietas. Había
firmado alguna portada de La Familia Ulises porque aparte de
los personajes había una estructura mucho mas amplia y consideraba
que poseía un poco de merito por mi parte.
“A Blanco le gusta captar
directamente los temas y las ideas de la realidad, de la que es
curioso observador. Quizá por ello sus historias destaquen tanto por
su originalidad y dotes de creación” Libro Humor grafico español
del siglo XX. Salvat, 1970.
Habla Josep Lluís, nieto de
Benejam:
Quiero agradecer en nombre nuestro y de la familia
Benejam a los promotores que habéis realizado esta exposición y a
los coleccionistas que hace años que nos conocemos. Esta iniciativa
de volver a recordar esta generación de dibujantes que si hubiesen
nacido en Estados Unidos o Alemania serían muy conocidos pero como
nacieron aquí, pues no. Estas reflexiones en relación a recuperar
esta generación de dibujantes y publicaciones pienso que es muy
interesante. Y es interesante abordarlo desde muchos puntos de vista.
Estos originales, que ya conocía de
otras muestras, tienen un valor básicamente artístico, y para el
que esté interesado en conocer el mundo de la ilustración, de la
creación de la historieta y el dibujo. Pero pienso que también es
interesante ver el TBO y entender un poco lo que significó. Algún
día se podrá ver esto como una historia de emprendedores porque es
necesario recordar que lo que Buigas y Viñas hicieron fue muy
complicado. Fue en un momento de preguerra y posguerra absoluta y de
muchas dificultades, en un local muy pequeño de la calle Aribau que
recuerdo perfectamente, el TBO. Allí consiguieron, no sé como, un
conjunto de dibujantes de primerísima calidad. Un autentico equipo
de primera línea y se convirtieron en una de las revistas mas
publicadas de España en aquellos momentos difíciles. Mi madre me
explicó que mi abuelo mantuvo una familia de dos generaciones,
dibujando en los años treinta y cuarenta. Claro que dibujaba mucho,
el 70 % del TBO. Recuerdo que dibujaba hasta la noche, porque
vivíamos en la misma casa, que antes estas cosas se hacían.
Es bueno que se homenajee a esta
generación pero por muchos aspectos, sin querer hacer paralelismos
sencillos, pero si que es bueno que la juventud que hoy se quiera
introducir en el mundo de la creación, piense que esto crudo se ha
tenido muchas veces, pero la creación siempre se abre camino,
gracias a que hay gente entusiasta. Sin tener muchas herramientas
logran publicar una revista que llegue al gran publico y que hasta se
convierta en un referente de cierta popularidad y de creación
artística. Para nosotros es muy emocionante que recordéis esta
generación de dibujantes.
Mi abuelo era barcelonés. Nacido en
Ciutat Vella de Menorca, pero era de aquí. Era un señor de
Barcelona, un señor de l´Eixample. Los señores que lo encontraban
lo llamaban Señor Benejam. Iba con sombrero. Era de aquí. Os
felicito a los de Sant Andreu porque la primera exposición que ha
tenido este señor, que murió en el año setenta y cinco, en
Barcelona, si no me equivoco, es esta. Enhorabuena a los responsables
por que ya era hora. Alegrémonos el día que llega.
Ruegos y preguntas:
Hubo una persona que se apuntó que,
aunque más pequeños, se habían realizado dos homenajes a Benejam y
TBO. Por parte de el Club DHIN en los sesenta estando él con vida y
por ellos (la persona que hablaba) en Guinardó en el año 1992 en
plan pequeño y dedicada más a la revista TBO. Esta persona también
se quejó de que no hubiera merchandising de TBO en la exposición,
pues ellos si la aportaron en aquella y esta la ven muy uniforme.
La organización le comentó que la
idea era centrarse solo en la figura de Benejam y La familia
Ulises. Aparte de que este material no abunda tanto y no es tan
fácil de encontrar.
HAN ESCRITO
DE MARINO BENEJAM Y LA FAMILIA
ULISES:
"Su obra, dinámica sin discusión, nos
aporta el conocimiento progresivo de un mundo que en todo momento
parece sacado de los “apuntes del natural” típicamente
burgueses, sólo que, naturalmente, integrados al progresismo
explicativo del cómic.(...) El estado social de los Ulises es un
jumellage apasionante entre dos clases: la menestralía
barcelonesa de anteguerra y la burocracia posterior, que engendraría
en parte la clase media. En esta encrucijada, la familia sufre los
males de ambos estamentos sociales, y sus abstenciones marcan
claramente las de una gran parte del país” Terenci Moix. Los Cómics arte para el consumo y formas pop. Llibres de
Sinera, 1968
"Los años del hambre, el estraperlo, la
era del gasógeno, la potenciación del fútbol como espectáculo
nacional, la era del biscuter, la moda James Bond, el boom de los
seriales radiofónicos, el nacimiento de la televisión, el
encumbramiento de las figuras del cine o el rechazo de los hippies.
Todos estos fenómenos sociales y muchos más desfilan por las
páginas de La Familia Ulises (...) una auténtica odisea posbélica
, y su tribu familiar que acude unida a todas partes.(...)Por eso La
Familia Ulises, desde 1944, ha sido una historieta costumbrista sin
pertenecer al subgénero de las series familiares en cuanto que no
plantea ni presenta en modo alguno la problemática interna de esa
familia, las relaciones de sus miembros entre sí y con la sociedad".
Salvador Vázquez de Parga. Los cómics del franquismo.
Editorial Planeta, 1980.
"La gran figura de esta publicación fue
Marino Benejam (1890-1970). (...)La Familia Ulises llegaría a ser la
más cabal sátira de las desventuras prosaicas de la familia pequeño
burguesa española, con suegra, hija casadera, dos hijos menores y
perrito, sometida a la tensión entre la aspiración social-o por lo
menos a una supervivencia decorosa- y la dureza de la realidad." Roman
Gubern. Historia de los cómics. Tomo 2 Toutain
Editor, 1982
“Los Ulises formaron una curiosa
célula familiar que reflejaba los anhelos y deseos de la pequeña
burguesía barcelonesa.(...)”El guionista Josep Gálvez recuerda el
éxito acaparador de La Familia Ulises. De pequeño cuando salía a
pasear con la familia, era el único niño del grupo. Todo el mundo,
unas ocho o diez personas grandes, se ponían a comentar la
historieta de los Ulises. Con la misma naturalidad que hoy
comentaríamos un programa de televisión”. Hoy podriamos decir que
los Ulises fueron unos craks mediáticos.” Sebastià Roig.
Les generacions del cómic. Editorial Flor del Vent, 2000.
“Mi impresión fue de que se trataba
de una persona sumamente modesta y comunicativa, dada su categoría
profesional. (...) Don Marino Benejam ilustrador de personajes como
“Melitón Pérez y “Eustaquio Morcillón” entre otros, su gran
popularidad la alcanzó con los episodios de la familia de Don Ulises
Higueruelo del Monte, conocida popularmente como “Familia Ulises".
Rosa Segura. Ediciones TBO ¿Dígame?. Marrè Produccions
editorials, 2006
"Podemos considerar a Benejam como uno
de los dibujantes más representativos de la historieta del humor de
la posguerra, y sin duda, se trata de una de las almas de TBO.
Trabajó como dibujante artístico y publicitario, hasta que pudo
consolidar su vocación de dibujante de historietas. De estilo
minucioso y expresivo. (...)Un fino retrato-con carga crítica- de
las aspiraciones, alegrías y tragedias de una familia de la clase
media española durante el franquismo, documentando fidedignamente la
mentalidad y las vivencias de los hogares de la posguerra a lo largo
de más de treinta años, en lo que Terenci Moix calificó de
“parábola sociológica” Kap. Del tebeo al manga. Tomo 8. Panini Comics,
2011.
LA FAMILIA ULISES
Del 19 de septiembre al 5 de octubre
de 2012
Biblioteca Igansi Iglésias-Can
Fabra (segre, 24-32)
Barcelona
OTRAS CURIOSIDADES:
Portada del TBO de 1988 para la que se utilizaron dibujos de Benejam. O al menos así lo indica su firma.
Robert Segura realizó varias portadas para este digno TBO con su cercana versión de la Familia Ulises. Actualizando eso si, el entorno, pues dudo que Don Ulises se encontrase con una moza en los viejos tiempos.
Incluso Jan dibujo a La Familia Ulises para un poster en el nº 6 de esta publicación.
Genial. Qué pena no haber podido ir a la Exposición. Con permiso, comparto vuestro enlace en estos dos foros que aconsejo visitar:
ResponderEliminarhttp://mangaclassics.mboards.com/1671915/9040918-la-familia-ulises-de-benejam/?pag=2
http://www.ojodepez-fanzine.net/latiacomforo/viewtopic.php?p=130662#130662
Muchas gracias.
En referencia a la persona citada que intervino al indicar que se había hecho una exposición en 1992,manifiesto que se hizo dicha exposición en Torre Llobeta con motivo de la Olimpiada Cultural, como también se hicieron dos exposiciones más por parte de la Col.lecció Araguás aquel mismo año olimpico.I.lustradors Catalans en la Casa Golferichs y Visions inèditas de Barcelona en el Foment Martinenc.
ResponderEliminarMuchas gracias por esta información complementaria
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