ENTREVISTA A
CARRILLO
-Eres uno de los pocos dibujantes de Bruguera que tanto realizó dibujo realista como cómico. Ahí están Los casos de Ching Chong, Kala-Bacín de Damasco y el citado Capitán Pantera que gustaron tanto a los chicos de los ochenta de las revistas Mortadelo.
Siempre he tenido inquietudes. Cuando empecé a dibujar me gustaba el dibujo cómico, pero luego me pasé al serio, con este me afiancé y lo conseguí todo. De todas formas dentro de mi estaba el gusanillo del humor. Cambié a este otra vez porque me di cuenta que en Bruguera y en algunas revistas francesas e italianas predominaba el humor. Entretiene y esta bien dibujado, veías los de
Gastón el gafe,
Astérix y Obélix... Pensaba me estoy matando haciendo cómic serio, al igual que los hermanos
Blasco, pero luego ves que los de humor venden más. Esto te va comiendo y vas viendo trabajos de otros como de
Raf, Segura,
Ibáñez o de
Vázquez. Te ríes con ellos, los aprecias pero te dabas cuenta de que en el tiempo que tu te hacías una página de serio, un dibujante de humor se hacía cuatro páginas y además las pagaban mejor. Por otro lado, ya estaba algo cansado del dibujo serio, las posturas, las peleas... Me aburría. Yo estuve trabajando para Italia en Editrice Universo y al cabo de cuatro años ya estaba harto del dibujo serio. Su director editorial venía una vez al año y sin tu decir nada te aumentaba el precio un 10 % y ya la última vez me dijo:
Señor Carrillo usted se esta olvidando de la ilusión. Esta tardando más en hacer las historietas. Era verdad y los deje, aunque luego dejaron de hacer cómics. Y me puse a invertir y a comprar tiempo con los ahorros que tenía. Esto me permitía estar dibujando cuatro o seis meses, cuando tenía las páginas las llevaba a Bruguera por ejemplo y siempre me las cogían. Hice
Los casos de Ching Chong, el detective japonés que no me salió muy bien pero lo hacia con ilusión. Me di cuenta de que no funcionaba y me inventé
Kala-Bacín de Damasco. Un niño árabe que trabajaba en el palacio del Califa. Un día limpiando una lámpara se le aparece un genio, le concede un deseo y
Kala-Bacín le pide una alfombra mágica. La hija y el mago del Califa van detrás para quitarle la alfombra. El único buenazo es el Califa. Es la lucha del niño por guardar su alfombra. Se producen situaciones divertidas. Además la hija del Califa físicamente esta muy bien como se puede ver en las viñetas. Hice bastantes y fui mejorando.
Dos grandes instantáneas Carrillo y Francisco Ibáñez en el Club Dhin
Al principio en Bruguera me dijeron: se te ve manera de humorista, te damos tres meses. Si en tres meses has progresado te cogemos todo lo que hagas de este género y sino te diremos que vuelvas al serio. Me inventé otros personajes y mi estilo paso al humor. Luego si trabajabas en otras editoriales ya llevabas esas muestras.
Me he dado cuenta que los dibujantes que hicieron dinero fue por el dibujo humorístico. Yo sigo haciendo dibujos de este tipo, y me sigo mirando
el Capitán Pantera cada ciertos días y sigo haciendo dibujos de él. En cierto modo, este último era dibujo humorístico con aventura.
Historieta de Carrillo para Joyas literarias Juveniles en 1975 titulada Aventuras del capitán Singleton. Una aventura muy curiosa porque no aparece ni una sola de sus lozanas mujeres en todo el tebeo. Arriba la página original que pertene a un gran coleccionista de este arte, debajo tal como se publicó.
He hecho más de dibujo cómico que de serio. De dibujo serio con aventuras del FBI y la revista Chicos desde el año 1953 hasta el 1977 aproximadamente y luego después hasta el 2001 todo humor. Para Dalmau hacia un álbum con rotulado de 44 páginas más portada cada mes, eso en cómic serio ni loco.
Álbumes para Dalmau Editors
-¿Recuerdas alguna historia o anécdota con los dibujantes de Bruguera (Cifré, Jorge, Peñarroya, Gin) ya que los conociste a casi todos?
Todos eran buenos. Yo veía sus originales y me maravillaba. Me sentía atraído y tenía que olvidarlos, desecharlos para volver al dibujo serio. Me atraían de tal manera que yo quería hacerlos también. Los admiraba de verdad.
La película de
Vázquez no me gustó. Él no se despertaba pensando en quien iba a estafar. Lo hacía por necesidad.
Vázquez nos invitó un día que acababa de cobrar a una bolera y a todo lo que quisiésemos picar jugando a bolos. Fuimos un grupo de dibujantes después de salir de Bruguera. Estando en la bolera, pedimos de todo y al cabo de un rato
Vázquez no estaba, pensábamos que estaba en el lavabo. Pregunte en guardarropía y hacía un rato que se había marchado. Tuvimos que pagarlo todo. Luego nos dijo que claro, como nosotros teníamos dinero... No te podías enfadar con él.
De izquierda a derecha: Cortiella, Freixas hijo, Emilio Freixas, Carrillo, Alberto Breccia, Antonio García y Luis García.
Carrillo con su mujer y Bosch Penalva
Yo sé que algunos pintores se van a molestar pero un dibujante de historieta seria mueve las figuras sea un joven, chica guapa, viejo o niño y los objetos, autocares, coches, ect. La vida de un pueblo o ciudad te la mueve de memoria y un pintor es incapaz de hacer esto. Un pintor es copiar. Copiar muy bien la naturaleza, una figura, o modelo. Pero el dibujante te hace la modelo sin copiarla y mejor que el pintor, pero la historieta es un mundo olvidado. Es así. Para mí ser dibujante de tebeos es lo mejor que hay. Lo creo y no lo digo porque es mi profesión. Lo creo. Todos estos dibujos que ves por aquí están hechos de memoria y todos los personajes son diferentes. El dibujante mueve a los personajes como quiere y los lleva a donde quiere. El pintor no, el pintor copia. Tienen mucho merito los cuadros de los pintores antiguos y de muchos de ahora pero ahí acaba la historia. La historieta es la base de todo, pero cuesta más que hacer un cuadro. Hay que machacar y machacar pero si lo haces con voluntad, ilusión y ganas te saldrá bien.
Cuando llegas a una edad todo te resbala y vives de lo que has hecho. Yo no soy orgulloso pero reconozco que soy un dibujante bueno. Sin vanagloriarse, ni ser presuntuoso, esto te permite cuando ves otros trabajos de otros dibujantes poder opinar con fundamento y decir la verdad. Y si es un dibujante mediocre pues lo digo.
-¿Crees que la historieta desaparecerá?
Ya esta desapareciendo desde hace mucho. A no ser que ocurra un milagro tiene los pasos contados. Cuando la gente no compra tebeos ya es que esta cayendo. Mal vamos cuando no los compra ni de un género ni de otro. Mal vamos cuando los periódicos dicen que no a un dibujante porque ocupa un espacio. Yo a partir del 2002 empecé a salir de mi mundo, y pensar ¿donde he estado yo?. Claro había tenido trabajo hasta entonces, pero te das cuenta que muchos no. Te das entonces cuenta que el kilo de dibujante de cómic no vale apenas nada. O te retiras, o sigues mendigando un trabajo.
Esta el manga que tiene algunos buenos dibujantes. Los mejores son los que están hechos por un solo dibujante, por que hay mucho trabajo en cadena. Hay mangas de todo tipo, pero aquí también se vende cada vez menos por la situación en que estamos.
Coleccionar tebeos también depende de la situación económica de cada uno. Hay gente que se sacrifica por esta afición.
Desde que vivo en esta casa he dibujado aquí. Conservo el frasco donde lavaba el pincel, el tintero de la pluma y el pincel, la goma de borrar, el trapo..., el papel que me ponía debajo porque en verano me sudaba la mano. Donde dejaba el reloj para no llevarlo puesto, la radio. Como dicen, Siempre, algo queda. He tenido dos infartos de retina y ahora me cuesta dibujar. Solo hago dibujos en grande porque ya me cuesta, para mi, para mis amigos y coleccionistas.
Posible caricatura del autor dibujando in situ sus exóticos cómics en La Isla Loca. Algo alejado de la realidad porque el autor nunca ha estado ni en la India ni en los Mares del Sur. Siempre ha usado libros de viajes, mapas y planos. A este respecto el autor contestaba lo siguiente en un Entrevista en El Boletín especial nº 16 del año 2005. “Sobre los mapas situaba las ciudades e intentaba calcular las distancias reales a base de calcular con una regla los espacios en el mapa, compararlos con distancias conocidas del mapa de España y trasladarlos en kilómetros a la historieta y la verdad es que no se me ha dado mal. A título de anécdota una vez en la Feria de Fráncfort vino un editor de un periódico de la India atraído por las muestras publicitarias que le habían mandado de mi agencia y preguntó si había estado en la India, pues los datos y distancias que daba en la historieta eran casi perfectos.
Divertida foto de Carrillo disfrazado como alguno de sus personajes de cómic.
Entrevista realizada en enero de 2014. Fotos archivo de Carrillo
OBRAS AL ALCANCE:
Con los tres tomos de EDT dedicados a Gora Gopal, el Capitán Pantera y Los Mercenarios las nuevas generaciones pueden descubrir por que Carrillo es un Maestro del cómic.
LOS MERCENARIOS INTEGRAL
Un oportunidad única de enrolarse junto al Capitán Tom Rowe en los Mares del Sur contra piratas y acompañado de chicas hermosas. El cómic fue creado en 1974 mediante Selecciones Ilustradas para Inglaterra y permaneció inédito en España hasta que fue publicado por Bruguera en 1984 en sus revistas tipo Mortadelo, pero nunca antes había sido recopilado en un integral. Los mercenarios es un joya visual en cuanto al dibujo ya que Carrillo domina todos los escenarios (paisajes, vehículos y por supuesto personas). Aventura lineal y acción sin más pretensión que entretener.
Año 2012
Editorial: EDT
268 páginas- B/N
Formato: Cartoné
Medidas: 18,5 x 26,5 cm
Precio: 15 euros
El CAPITAN PANTERA INTEGRAL
Muchos lectores de tebeos recordaran a este personaje de los tebeos de Bruguera. Allí fueron publicadas historietas largas junto a otras de una sola página en Super Mortadelo. El personaje marinero estrella de Carrillo pasa en 1983 del estilo realista al humorístico pero sin perder por el camino las buenas dosis de aventuras, esta vez con más comedia y humor. ¡El héroe desenfadado! El personaje se publicó en Inglaterra, Italia y Dinamarca.
Editorial: EDT
304 páginas- B/N
Formato: Cartoné
Medidas: 17 x 23,5 cm
Precio: 19,95 euros
GORA GOPAL
Y OTRAS AVENTURAS EXÓTICAS
Este tomo contiene las aventuras selváticas al más puro estilo Tarzan en defensa de su mundo y los animales de la selva del Indostán en la India. Nuevamente aventura clásica con todos los elementos de Carrillo trasladados a la selva: cazadores de animales, mujeres bellas, bandidos. Fue una de las series más exitosas ya que se publicó en multitud de países. La primera historia la publicó con el nombre de Gopal en Super Pulgarcito (1972) continuo primero en la revista Zeppelín nº 6 y luego en la revista Chito (1974). La serie también tuvo otros nombres como Gopal y Sambhur.
Otra buena oportunidad de descubrir este personaje. Se complementa con algunos episodios de una serie tropical con toques más ligeros del autor: La Isla Loca. Además el tomo contiene un excelente prólogo de Alfredo Lara López y un interesantísimo artículo escrito por Carrillo titulado Recuerdos
Editorial: EDT
192 páginas-B/N
Formato: Cartoné
Medidas: 26,5 x 18,5 cm
Precio: 15 euros